El consejo de administración de Twitter ha aprobado un recorte de hasta 336 puestos de trabajo, lo que representa aproximadamente el 8% de su plantilla global, en el marco del plan de reestructuración puesto en marcha por la red social de microblogging para buscar una mayor eficiencia y crecimiento.
La compañía ha indicado en un comunicado a la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) que esta reestructuración forma parte de un plan general para centrarse en sus productos prioritarios e impulsar la eficiencia en todo el grupo.
Asimismo, la red social ha explicado que su intención es reinvertir los ahorros logrados con este plan en sus áreas centrales con el fin de impulsar su crecimiento. Twitter estima que el gasto total por reestructuración estará entre los 5 millones de dólares (4,39 millones de euros) y los 15 millones de dólares (13,17 millones de euros) y se incluirán en su mayor parte en el trimestre finalizado el 31 de diciembre de 2015.
Asimismo, la compañía ha señalado que los ingresos y el beneficio bruto de explotación (Ebitda) ajustado del tercer trimestre estarán en línea o por encima de sus previsiones anteriores, que estimaban unos ingresos de entre 545 millones de dólares (478 millones de euros) y 560 millones de dólares (492 millones de euros), y un Ebitda de entre 110 millones (96 millones de euros) y 115 millones de dólares (101 millones de euros).
Hoja de ruta "optimizada"
El cofundador de Twitter Jack Dorsey, que fue nombrado hace unas semanas consejero delegado en sustitución de Dick Costolo, ha indicado en una carta a los trabajadores que se trata de un paso que "no es fácil. Pero es correcto".
"El mundo necesita un Twitter fuerte, y este es un paso más para lograrlo", ha explicado. Dorsey ha indicado que el equipo ha estado trabajando "día y noche" para elaborar una hoja de ruta "optimizada" para Twitter, Vine y Periscope centrada en experiencias que tendrán "mayor impacto".
El directivo ha adelantado que se van a hacer los cambios más "significativos" en las áreas de Producto y de Ingeniería, que, a pesar de ello, seguirá siendo la que más peso tenga en la plantilla total. "El resto de la organización se racionalizará en paralelo", ha explicado.
El directivo ha asegurado que este plan se realizará con el "máximo respeto" por cada persona, con una indemnización "generosa" para los tranbajadores afectados, así como con ayudas para encontrar un nuevo trabajo.
