Vacaciones
El verano casi infinito en Cedeira, la localidad coruñesa donde aprovechar los últimos días de vacaciones
Esta pequeña localidad coruñesa se ha convertido en refugio de los que buscan aprovechar los últimos coletazos del período estival.
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"¿Cuántos días faltan para que termine el verano?" Esta pregunta no se la hacen los que disfrutan estos días de una de las esquinas más al noroeste del país. Cedeira, una pequeña localidad de poco más de 6.500 habitantes, se ha convertido en el destino favorito de los que huyen de las grandes aglomeraciones, buscan temperaturas suaves y garantizar, pese a ello, buen tiempo.
Durante el mes de agosto se ha convertido en uno de los nuevos enclaves vacacionales de Galicia. Desde hace unos años la presencia de personajes públicos por la zona no pasa desapercibida pero, también, saben los que la visitan que allí "nadie te molesta". Alberto Núñez Feijóo, José Luis Martínez Almeida, Florentino Pérez y este fin de semana, los propietarios del Xarifa, un espectacular velero de 1927, se han convertido en los abanderados de la Villa.
Pero, más allá de los famosos, las fotos y el lleno total, septiembre se ha presentado como la oportunidad perfecta para huir del bullicio y la masificación. "Llegamos el día 1 y creo que todos los días hemos ido a la playa. Temperaturas agradables, el agua está buenísima y diría que somos 10 en un arenal de 800 metros", comenta una de las asiduas a las aguas de la playa de la Magdalena.
Planes alernativos si hay lluvia
¿Y si llueve? Porque en Galicia se sabe que el tiempo "depende" y hay que buscar planes alternativas. Visita obligada a los acantilados de 'A Capelada', en el mismo municipio, los más altos de Europa y con una acceso por carretera plagado de caballos y vacas salvajes. Igual de indispensable es hacer una parada en alguno de los miradores del camino y disfrutar de los animales, sin acercarse demasiado, y de las vistas.
Por último, y a muy pocos kilómetros de Cedeira, nos encontramos San Andrés de Teixido que, parafraseando al dicho, hay que visitarlo una vez en la vida. "Vai de morto quen non vai de vivo" (va de muerto quien no va de vivo). Así que si todavía tienen unos días de vacaciones, quieren disfrutar de la playa, de temperaturas máximas de 27 grados, noches agradables, cero aglomeraciones y un paisaje de ensueño... Cedeira sigue viviendo un verano infinito, o casi, siempre "depende".
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