El juez de Lleida que investiga la muerte de dos agentes rurales tiroteados por un cazador ha ordenado reconstruir el doble crimen tras tomar declaración al acusado, que ha admitido que hizo tres disparos a las víctimas, aunque sigue sin explicarse el porqué.
El cazador, Ismael Rodríguez, de 28 años y vecino de Vacarisses (Barcelona), ha declarado como investigado ante el juez de instrucción de guardia de Lleida.
Como ya hiciera cuando fue interrogado por los Mossos d'Esquadra que lo detuvieron el pasado sábado, el cazador ha insistido en que no se explica por qué disparó a los agentes rurales que le requirieron el permiso de caza y ha afirmado que se siente muy arrepentido de lo que hizo.
Según ha explicado a la prensa su abogada, Montserrat Torres, al salir del juzgado, el detenido, que se entregó a los Mossos tras el doble crimen, ha asegurado que le ha estado "dando muchas vueltas", pero sigue sin explicarse lo sucedido.
"Si llega a pensar, hubiera preferido que le retiraran el arma y le cayera una buena multa a lo que le puede llegar a caer ahora", ha añadido su letrada.
Lo que sí ha dicho recordar el detenido es que disparó tres tiros a las víctimas, desde una distancia de aproximadamente cinco metros, han añadido las mimas fuentes.
Mientras tanto, el juez instructor y la comitiva judicial, junto al propio detenido, se han desplazado al coto privado de caza de Aspa donde ocurrieron los hechos para llevar a cabo una reconstrucción del doble crimen.
