Vox ha congregado este sábado a unas 5.000 personas, según la Guardia Urbana, frente a las fuentes de Montjuïc de Barcelona en una concentración donde su presidente, Santiago Abascal, ha pronunciado un discurso en el que ha arremetido contra "los enemigos de España". Mientras, la manifestación convocada por grupos independentistas y por los Comités de Defensa de la República (CDR) contra el acto se ha saldado con siete detenidos, varios heridos y numerosos incidentes entre manifestantes y Mossos d'Esquadra en los alrededores de la plaza de España.
Vox eleva a más de 15.000 la cifra de asistentes a esta concentración, convocada bajo el lema "Cataluña por España". Abascal ha hecho pivotar su parlamento sobre varios ejes: la condena a los postulados independentistas y la, a su juicio, inacción de "la izquierda desleal", la "derechita cobarde" del PP y la "veleta naranja" de Ciudadanos, proclamas contra los migrantes en situación irregular y enardecidas críticas a la Unión Europea.
Los concentrados, que portaban numerosas banderas españolas -algunas de ellas con simbología franquista- y de la Guardia Civil, han lanzado gritos como "Golpistas a prisión", "Puigdemont a prisión", "Torra a la mazmorra" o "Cataluña es España". Abascal ha prometido que si es elegido presidente del Gobierno suspenderá nuevamente el autogobierno catalán, "disolverá" a los Mossos d'Esquadra e instará a la Fiscalía a detener al presidente de la Generalitat, Quim Torra.
Ha afirmado que "los enemigos de España estarán más pronto que tarde fuera de las instituciones democráticas", en referencia a unos partidos independentistas "a los que hay que expulsar de la legalidad de una vez por todas", y ha dicho que "Cataluña no es una nación, es algo mucho más importante: es una región de España". Ha aseverado que "España ni se discute, ni se dialoga, ni se negocia", sino que "se defiende hasta las últimas consecuencias".
Además de Abascal han tomado la palabra, entre otros, el secretario general de la formación de extrema derecha, Javier Ortega Smith, y el cabeza de cartel por Barcelona el 28A, Ignacio Garriga. Ortega Smith, abogado de la acusación contra los líderes independentistas en el juicio del Tribunal Supremo, ha asegurado que los acusados "muy pronto sabrán de las sentencias condenatorias e irán a cumplir prisión muchos años", porque "vencerá la justicia, la libertad, el Estado de derecho, vencerá Cataluña y vencerá España".
Antes de este acto, varios centenares de personas se han concentrado convocados por los Comités de Defensa de la República (CDR) para manifestarse en su contra. La manifestación se ha saldado con siete detenidos, varios heridos y numerosos incidentes entre manifestantes y Mossos d'Esquadra en los alrededores de la plaza Espanya. Tras topar con un cordón de Mossos en la calle Tarragona, a la altura de la plaza Espanya, y después de lanzar varios objetos como huevos o piedras, los concentrados han utilizado material de obra de las calles aledañas para formar una barricada.
Posteriormente se han desplazado por las calles de la zona, derribando contenedores de basura y obstaculizando el paso a vehículos colocando en la calzada vallas de obras y otros objetos.