Así se preparan los colegios electorales para la ola de calor el 23J

Las elecciones del 23J serán las primeras acaecidas en verano y coinciden con gran parte de la península ibérica luchando contra una ola de calor histórica. El principal problema de cara a la votación reside en que la mayoría de colegios electorales no cuentan con climatización ni instalaciones apropiadas para enfrentarse a las altas temperaturas.

Los ciudadanos hemos votado en otoño, invierno o primavera, pero, en los 40 años de democracia, jamás se han convocado elecciones generales en verano.

Las únicas comunidades autónomas en las que los habitantes han tenido que ejercer su derecho a voto durante los meses calurosos han sido Galicia y el País Vasco, y fue de forma excepcional debido a la pandemia. Es más, en Andalucía hay una ley que prohíbe celebrar elecciones autonómicas y municipales desde el 1 de julio hasta el 31 de agosto. La ley, llevada a cabo por Manuel Chávez en 1994, solo afecta a la convocatoria de elecciones a nivel autonómico y no a nivel estatal, por lo que los residentes andaluces tienen el deber ciudadano de participar el 23J.

Los expertos recuerdan que el año pasado julio fue el mes más caluroso desde que se tienen datos, y prevén que el día de las elecciones las temperaturas serán muy elevadas.

Algunos ayuntamientos están tomando medidas excepcionales para hacer más llevadera la jornada de calor prevista para el próximo domingo. Ejemplo de esto sería las medidas emprendidas por ciudades como Antequera, donde el ayuntamiento ha contratado 30 aparatos de aire acondicionado parapreparar los colegios electorales.

En Roquetas del Mar, Almería, van a trasladar todas sus mesas electorales a edificios climatizados como bibliotecas o palacios de congresos.

Lo mismo ocurre en Tres Cantos, Madrid, localidad en la que se han habilitado desde polideportivos hasta el propio ayuntamiento para que se pueda votar. El concejal a la presidencia del ayuntamiento solicitó a la JEC la autorización para poder aclimatar los colegios electorales y para que se cumplan las condiciones necesarias a la hora de albergar una jornada electoral.

Para aquellos casos en los que no contemos con aire acondicionado, el Consejo General de Arquitectura Técnica ha ofrecido algunas pautas para reducir la temperatura de las salas entre cuatro y cinco grados. Algunas de las medidas propuestas por Juan López Asiaín serían buscar aulas orientadas al norte, ya que son las más frescas, optar por plantas bajas o semisótanos e intentar crear corrientes de aire. Es importante evitar las aglomeraciones, ya quecada persona emite cerca de 200 vatios a la hora de energía y calor. Hay que intentar reubicar a la gente fuera de las salas en espacios de espera frescos.

Todas las medidas que se puedan tomar son necesarias, sobre todo para aquellas personas con problemas de salud o para los que tienen que estar en las mesas electorales doce horas o más, desde por la mañana temprano hasta por la noche.