Las acusaciones de agresión sexual contra Errejón, en la viñeta gráfica

La reciente dimisión de Íñigo Errejón, ex portavoz de Sumar, ha sido el tema de los últimos días en el panorama político y social. Tras haber sido acusado de acoso y agresión sexual por varias mujeres anónimas a través de la periodista Cistina Fallarás, el político anunció la dimisión de su cargo, alegando haber "llegado al límite de la contradicción entre la persona y el personaje" y asegurando "estar trabajando en un proceso personal y de acompañamiento psicológico".

La actriz y presentadora Elisa Mouliaá presentó una denuncia contra Íñigo Errejón por acoso sexual ante la Policía Nacional. En su testimonio, Mouliaá relata que tras mantener contacto durante un año en redes sociales, ambos se encontraron en la presentación de un libro de Errejón. Al finalizar el evento, fueron a una cervecería, y posteriormente, ella lo invitó a una fiesta. Allí, según Mouliaá, Errejón la besó sin su consentimiento en el ascensor, mostrándose cada vez más agresivo. Durante la fiesta, al bailar con un amigo, Errejón, molesto, la llevó a una habitación donde, según su denuncia, continuó con tocamientos no consentidos. Más tarde, en la casa de Errejón, los incidentes continuaron.

La viñeta de Alfredo Boto hace referencia a toda la polémica en torno a las acusaciones de acoso sexual que pesan sobre Íñigo Errejón. En la imagen, Errejón aparece en un atuendo teatral, haciendo referencia a la época shakesperiana, con una versión miniaturizada de una mujer en la mano que representa a las víctimas. El diálogo: "¿Sí es sí? ¿No es no? ¿Esa es la cuestión?", parodia la célebre frase "Ser o no ser" de Hamlet.

Este comentario irónico señala la contradicción entre la postura feminista que Errejón había defendido públicamente y las graves acusaciones en su contra. La frase hace alusión a la ley del "Solo sí es sí", una legislación que el propio Errejón apoyó y que ahora se ha vuelto en su contra tras las múltiples denuncias de acoso y agresión sexual.

Hasta ahora, el político no ha dado declaraciones públicas sobre las acusaciones en su contra. Por su parte, desde SUMAR han asumido su "responsabilidad", reconociendo que los "mecanismos internos fallaron". Por otro lado, han asegurado que estas desde el partido no conocían estas informaciones y que de lo contrario "la decisión se habría tomado mucho antes".

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