El presidente del Parlament, Roger Torrent,durante el pleno de investidura

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LA REPETICIÓN DE COMICIOS, EN JULIO

Ahora sí empiezan a correr los plazos en Cataluña: el independentismo tiene hasta el 22 de mayo para pactar y evitar ir a nuevas elecciones

Si se consumieran los próximos dos meses sin que hubiese sido investido un nuevo presidente de la Generalitat, serían convocadas de forma automática unas nuevas elecciones al Parlament entre 40 y 60 días después, según establece el Estatut.

Las fuerzas independentistas tendrán margen hasta el 22 de mayo para pactar la investidura del nuevo presidente de la Generalitat y evitar así una repetición de las elecciones, en julio. El hecho de que este jueves se realice una votación deja activada la cuenta atrás de dos meses que prevé la ley.

El 22 de mayo, pues, consumidos estos dos meses sin que hubiese sido investido un nuevo presidente de la Generalitat, serían convocadas de forma automática unas nuevas elecciones al Parlament entre 40 y 60 días después, según establece el Estatut.

Después de tener que renunciar a la investidura primero de Carles Puigdemont y luego de Jordi Sànchez, hoy JxCat ve frustrado su intento de investir en primera votación a Jordi Turull, que este viernes debe acudir a la vistilla del Tribunal Supremo.

Hay incertidumbre sobre qué pasará con la segunda votación de la investidura, que tendría que celebrarse 48 horas después de la primera, es decir, este sábado, aunque a estas horas JxCat no sabe si el Supremo dictará o no mañana prisión preventiva para Turull.

Si tampoco es posible culminar su plan C, que pasaba por investir a Turull, JxCat deberá buscar un nuevo candidato, esta vez ya libre de causas judiciales, y ahora mismo hay diversos nombres sobre la mesa, como los de Elsa Artadi, Eduard Pujol, Quim Torra y Marc Solsona.

Sea quien sea el elegido, si los cuatro diputados de la CUP mantienen su abstención porque el plan de gobierno no incorpora elementos de desobediencia para construir la "república" catalana, JxCat y ERC se verán abocados a esperar la renuncia a su escaño de Carles Puigdemont y Antoni Comín, ambos en Bélgica, para que entren otros dos diputados de sus candidaturas que sí puedan votar.

En ese caso, bastarían los 66 votos de JxCat y ERC para investir, en segunda votación y por mayoría simple, a un nuevo candidato, sin que hiciese falta más que las cuatro abstenciones de la CUP.

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