Con las cifras de contagios y de fallecidos por coronavirus disparadas en esta segunda ola de la pandemia, las comunidades han endurecido las restricciones que afectan a la hostelería y al comercio que ya tenían en vigor y que dibujan un país con las medidas más duras desde el confinamiento de la pasada primavera. Y las comunidades, que tienen que afrontar el coste de tomar estas medidas, reclaman al Gobierno que actúe para que tengan respaldo si se llega a tener que volver al confinamiento total.
Cierres, pero no confinamiento domiciliario
Si primero fue el ocio nocturno, el sector señalado como uno de los principales focos de contagio, ahora las miradas se dirigen a los establecimientos hosteleros y comerciales, que ven cómo las principales medidas adoptadas para frenar el coronavirus hacen tambalear el futuro de sus negocios. El abanico de restricciones que afectan a la hostelería en España contempla desde el cierre total de los establecimientos, con permiso para entregar a domicilio o recoger en los propios locales, a las limitaciones en aforos y en horarios de apertura. La primera comunidad en decretar el cierre de bares y restaurantes fue Cataluña. Le siguieron Navarra, Asturias y Melilla, y, ahora, Galicia, País Vasco y Castilla y León mantendrán cerrados bares, cafeterías y restaurantes. En Cantabria sólo podrán funcionar las terrazas de los establecimientos, al igual que en Aragón, donde el aforo de estos espacios está limitado al 25 %. Limitaciones horarias tiene la hostelería en La Rioja, donde puede abrir hasta las 22 horas, excepto en Logroño y Arnedo, cuyos bares y restaurantes echaron el cierre cuando el Ejecutivo regional ordenó el confinamiento perimetral de estas dos localidades y de la comunidad.
Estas comunidades son las que han reclamado al Gobierno que tome decisiones ya para facilitar que se pueda poner en marcha un confinamiento domiciliario, si es necesario, y que ellas no tienen cobertura para decretarlo. Desde Castilla y León hasta País Vasco lo han pedido de diferentes formas y en diferentes momentos.
También Andalucía
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno ha declarado: "Si hay que tomar decisiones, que se tomen ahora y se prepare el terreno para el futuro", insistiendo reclamar al Gobierno que revise el marco normativo para que se puedan tomar decisiones sobre un confinamiento domiciliario. La Junta prepara nuevas restricciones que afectarán a la hostelería, los deportes y actividades comerciales y al aire libre o movilidad.
Otras opciones
Los gobiernos autonómicos de Castilla-La Mancha, Andalucía, Madrid, Baleares y Extremadura han adoptado medidas menos restrictivas, que afectan principalmente a los aforos de los locales. Así, las terrazas de bares y restaurantes en Castilla-La Mancha pueden estar al 75 % y en el interior al 50 %, mientras que Extremadura tiene aforo del 40 % dentro de los locales y al 50 % en terrazas. Los establecimientos de hostelería y restauración en Madrid, limitados a la mitad de aforo en el interior, cierran a las 00.00 horas, coincidiendo con el comienzo del toque de queda en la capital. Además, los locales situados en las 35 zonas básicas de salud con restricciones de movilidad deberán tener reducida la capacidad de sus terrazas a la mitad. También el comienzo del toque de queda marca el horario de cierre de los bares y restaurantes en Ceuta -a las 22.00- y Baleares -a las 00.00 en Mallorca, Menorca y Formentera y a las 22.00 en Ibiza.