Ángel Carromero ha estado en Espejo Público donde ha presentado su libro en el que cuenta lo que ocurrió durante cinco meses, por qué fue a Cuba, cómo vivió un "secuestro", un "juicio farsa" y cómo logró volver a España. "Es una historia para hacer justicia a lo que pasó en Cuba que es la desaparición de la persona más importante de la disidencia cubana".
Asegura que su partido se portó bien con él, y resalta la figura de la presidenta del Partido Popular de Madrid: "Esperanza Aguirre se portó muy bien conmigo".
Por otra parte, apunta que "la posición de los Gobiernos es complicada en estos asuntos". Pero insiste en que "la familia de quien falleció también pidió el indulto para mí y aún continuamos a la epsera".
Carromero recuerda lo difícil de la situación que vivió. "Fue dramático, tenía 26 años, fui a Cuba a ayudar y me vi envuelto en una operación en la que el objetivo era que desaparecieran los líderes de la oposición", recuerda.
Asegura que en Cuba no hay Derechos Humanos, y que "a Oswaldo le hicieron lo mismo dos meses antes cuando viajaba con su mujer, ese es el día a día allí".
Hoy en día, Ángel Carromero lleva una pulsera telemática que "me restringe la libertad, yo no soy libre". Continúa cumpliendo una condena. "Una persona que es inocente está cumpliendo una condena", apunta refiriéndose a sí mismo, y añade que si la propia familia del fallecido pide su libertad, por algo será. "Tengo una libertad restringida".
Por último, recuerda que cuando estuvo en Cuba no pudo hablar con nadie solas y que al llegar a España y contó todo lo ocurrido, que era exactamente lo mismo que había contado la familia de Oswaldo durante seis meses.