Javier Arenas se ha mostrado convencido de que el presidente andaluz, José Antonio Griñán, ha hecho el Gobierno "más radical y menos institucional de la historia de Andalucía".
El rival de Griñán en las pasadas elecciones señaló que se trata de un nuevo Ejecutivo andaluz "completamente insensible a la necesaria austeridad", convirtiéndose en "un Gobierno líder en número de consejerías en la comunidad líder del paro en España y Europa".
"Griñán ha hecho su Gobierno teniendo muy presente las batallas internas del partido y pensando en los ERE", según Arenas, para quien es difícil de entender que desaparezca la Consejería de Empleo, sobre todo, cuando más "saneamiento necesitan las políticas de empleo frente a los fraudes del pasado".
Se ha mostrado convencido de que es un Gobierno diseñado desde el primer momento "para la confrontación" y que es el "más radical y menos institucional de la historia de Andalucía". Ha puesto el acento además en el hecho de que la cuota de gobierno PSOE "ha desconocido absolutamente la pluralidad de Andalucía", en referencia al hecho de que no hay consejeros de varias provincias.
En cuanto a su ausencia en el acto de toma de posesión de Griñán como presidente, Arenas ha querido dejar claro que no es nada habitual que la oposición acuda a este tipo de acontecimientos, recordando que nadie vio al secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, en la toma de posesión de Mariano Rajoy como jefe del Ejecutivo español.
Tras señalar que el PP-A no está para "aplaudir al Gobierno más radical para Andalucía", ha recordado que en ese acto de toma de posesión de Griñán han estado presentes, en nombre del Gobierno de la Nación, el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, y la delegada en Andalucía, Carmen Crespo, mientras que también han asistido el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, y los representantes del Partido Popular en la Mesa de la Cámara, "cumpliendo fielmente con su obligación institucional".
Arenas no ha evitado mencionar "el intento de veto" que se produjo a la intervención de Cristóbal Montoro en el acto de toma de posesión de Griñán, aunque finalmente el ministro sí ha realizado un breve discurso.
