Durante su intervención en el "Día del partido" en Igualada (Barcelona), Mas ha situado la fecha de la consulta soberanista en 2014, el año del Tricentenario, pues "tenemos las leyes para hacerlo y tenemos el compromiso de hacerlo". "Ese será el día en que salgamos a la calle de otra manera, no a hacer una manifestación o una cadena, ese día la gente de Cataluña tendrá que salir de su casa para ir a votar y lo deberá hacer con plena conciencia", ha resaltado el presidente catalán.
"Y si ese día, que será el día de la verdad, si ese día hay una mayoría clara del pueblo catalán que vota la libertad, si la gente vota libertad, Cataluña será libre ese día", ha augurado Mas. Artur Mas ha puntualizado que "libres no quiere decir aislados", y ha añadido, en este sentido, que "nuestro norte se llama Europa, es nuestro presente y es nuestra realidad desde hace muchos siglos". Ha apelado no obstante a "la Europa que solo se fija en el poder de los estados" a "observar con detenimiento y con mucho interés el movimiento democrático mas fuerte, mas pacífico y más ilusionante que en este momento hay en el conjunto del mapa europeo, que es el movimiento de la libertad de Cataluña".
El presidente de CDC ha advertido de la "campaña del miedo en el Estado español para hacer ver a la gente de Cataluña que según lo que hagamos y según qué proyectos o sueños, quedaremos fuera de esta Europa", a lo que Mas ha replicado: "No hagáis caso de lo que oigáis. Europa sabe muy bien que las fronteras son del pasado". En respuesta a las críticas recibidas por querer "levantar fronteras" en Cataluña, Mas ha denunciado "la incomprensión y la intolerancia de aquellos que levantan muros para que Cataluña no pueda desarrollarse con normalidad desde el punto de vista de su idioma propio, que no es otro que el catalán". Ha agregado, en este sentido, que CDC y la mayoría de las formaciones catalanas "lo que han hecho siempre, en lugar de levantar muros, barreras y fronteras con el Estado español, ha sido construir puentes de diálogo, de convivencia, para hablar y dialogar, para negociar y pactar, y para ayudar o ayudarnos mutuamente".
En cambio, se ha referido a determinadas voces que desde el Estado español dicen querer a los catalanes, "pero nos quieren arrodillados; nos quieren, pero siempre obedientes; nos quieren pero sin discutir lo que representa el conjunto del Estado y renunciando a aquello que es nuestro como la lengua, y nos quieren porque a través de producir y de 'currar' ayudemos, y lo hemos hecho de buen grado, a todo el conjunto".
Artur Mas ha asegurado que en el debate soberanista no caerá en provocaciones porque "el talante de Cataluña es pacífico, positivo y educado" y porque "la gente de Cataluña no tiene nada contra los pueblos de España, lo que pasa es que nos queremos emancipar porque queremos convivir con ellos, pero siendo nosotros mismos, sin renunciar a lo que somos". Mas también se ha referido a las acusaciones de "traición" por parte de dirigentes del PSC por haber votado en el Parlament, junto a ERC, ICV y las CUP, una resolución para llevar al Congreso de los Diputados la petición de una consulta soberanista en Cataluña.
"Lo que habría sido esta semana una traición -ha contestado- es no mirar lejos y no mirar adelante, y no estar a la altura de la gente que salió en la Diada Nacional de Cataluña. Esto hubiera sido una traición, nunca es una traición mirar adelante y mirar lejos". La celebración del Día de CDC ha reunido a unos 15.000 militantes y simpatizantes, según fuentes de la formación, entre ellos el ex presidente de la Generalitat Jordi Pujol y varios consellers, y ha contado con actuaciones musicales, actividades infantiles y puestos de venta de diversos artículos de signo nacionalista.