La Audiencia Nacional ha admitido a trámite por primera vez una demanda relacionada con el dispositivo anticonceptivo Essure, un implante que se usa como alternativa a la ligadura de trompas y que ha motivado numerosas reclamaciones de mujeres por sus efectos adversos. Así lo ha explicado Francisco Almodóvar, el abogado de Carolina Díez, una de las mujeres que sufrió esos efectos adversos desde que dispone de esta especie de muelle que se coloca sin anestesia en cada trompa de falopio.
El abogado especialista en derecho sanitario, que lleva el caso de 22 mujeres que han sufrido secuelas por este implante, presentó ante la Audiencia Nacional una demanda en nombre de Carolina Díez contra el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y sus órganos dependientes, el Sistema Nacional de Salud y la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (Aemps).
El letrado la interpuso después de que se desestimaran sus quejas en el proceso administrativo y ahora la Audiencia ha admitido su demanda que, según Almodóvar, "abrirá un proceso de investigación de la cadena de corresponsabilidad legal de los agentes que han intervenido en la transmisión de la información y la actuación de las autoridades y servicios médicos".
A medida que se vayan resolviendo el resto de procesos administrativos de las otras afectadas que defiende este abogado, intentará acumularlas en la misma causa que Carolina Díez, quien sufrió "muchos dolores que se han visto que son atribuidos a este producto".
Entre los efectos adversos que refieren las afectadas están inflamación y dolor pélvico, dolor lumbar y de piernas, dolor de cabeza, fatiga crónica, complicaciones como hemorragias o sangrados entre reglas, ausencia de menstruación durante varios meses, pérdida de cabello o reacciones alérgicas. El implante fue aprobado en Europa en 2001 y en Estados Unidos en 2002. Unas mil mujeres en España integran la Asociación de Afectadas por Essure, a través del cual plantean sus quejas sobre los efectos secundarios.