El presidente del Gobierno balear y del PP regional, José Ramón Bauzá, anunció que el partido ha forzado la dimisión de la alcaldesa de Ibiza, Pilar Marí, y de los concejales Juan Mayans, Alejandro Marí y Rai Prats "ya que su comportamiento no ha estado a la altura de las circunstancias". Bauzá ha avanzado, incluso, que el PP no descarta renunciar a la alcaldía porque no la va a "mantener a cualquier precio".
Según Bauzá y el presidente del PP de Ibiza, Vicent Serra, esta situación se ha producido porque los ediles contravinieron el acuerdo alcanzado por el partido para presentar a Prats como alcaldable al solicitar el regreso de Marí, que ya había anunciado su decisión "irrevocable" de dimitir.
Este hecho, que se produjo en una rueda de prensa de la que la formación no estaba al corriente, desencadenó anoche su cese fulminante en una junta de urgencia en la que estuvo presente la plana mayor del PP balear, con el presidente balear a la cabeza.
El presidente autonómico ha pedido disculpas a los ciudadanos: "Para nosotros y para mí, la política se entiende como una vocación de servicio en base a la solución de los problemas de los ciudadanos, y lo que se ha estado haciendo en los últimos tiempos en el Ayuntamiento no ha sido solucionar problemas, sino lo contrario, crear problemas a los ciudadanos".
Por ello, "se ha considerado por unanimidad que el comportamiento de determinados regidores del PP no ha estado a la altura de las circunstancias que se merecen los ciudadanos de este municipio" y "se ha pedido a Pilar Marí, Rai Prats, Alejandro Marí y Joan Mayans que pongan su cargo a disposición del partido, cosa que han hecho", ha manifestado en una improvisada comparecencia ante la prensa. La renuncia de los concejales se ha formalizado esta madrugada.
"No me importa perder la alcaldía si ganamos la confianza de los ciudadanos", ha insistido Bauzá, que ha explicado que en las próximas horas contactarán con las personas que completaban la lista electoral del PP en las pasadas elecciones para estudiar si pueden incorporarse al equipo de gobierno como nuevos concejales. "En función de la predisposición de estas personas valoraremos si presentamos candidatura a la alcaldía o si directamente renunciamos. Gobernar no significa ocupar la silla a cualquier precio", ha subrayado.
Por su parte, Vicent Serra ha presentado los motivos del cese de los ediles de Vila, que tuvo su origen en la comparecencia de prensa organizada a espaldas del partido para pedir que Pilar Marí siguiera al frente del consistorio.
"No se han respetado las decisiones adoptadas por el Comité de Dirección del partido en Eivissa. No se puede decir un día una cosa y al siguiente hacer otra totalmente contraria. Por eso José Ramón Bauzá se ha desplazado a la isla, puesto que la posibilidad de perder la alcaldía de la segunda ciudad de Baleares es una razón de peso para estar aquí", ha manifestado.
Al parecer, Pilar Marí estaba dispuesta a dar marcha atrás y no hacer efectiva la dimisión que había anunciado después de que varios de sus compañeros en el equipo de gobierno le hubieran pedido que reconsiderara la decisión de abandonar su cargo y que siguiera en la alcaldía hasta el final de esta legislatura.
Sin embargo, los ediles partidarios de la continuidad de Marí no midieron bien las consecuencias que podía acarrear el nuevo giro de los acontecimientos que proponían de forma unilateral y sin el consentimiento de la dirección del PP de Ibiza.
Así, su maniobra no solo no fructificó sino que sentó mal en el partido, tanto a nivel insular como balear. Serra ha dicho al respecto que las cosas que afectan al partido se pueden hablar y discutir, pero en el lugar y el momento adecuado, dando a entender que los ediles no habían obrado de forma correcta, lo que les costó la reprimenda de la dirección insular y regional del PP y su posterior destitución.