En septiembre debería haber presidente para presentar ante la UE las principales reformas

El candidato propuesto por el rey, Mariano Rajoy todavía no ha elegido la fecha en la que quiere presentarse a la investidura, para ello sí tiene margen de maniobra. No hay plazos establecidos, aunque sí hay urgencia política por salir de este largo impase.

Podemos suponer que ahora se inician dos o tres semanas de contactos y negociaciones. La previsible sesión de investidura podría ser a finales de agosto. Si Rajoy es investido presidente, durante el mes de septiembre habría que aprobar el techo de gasto, el déficit y el proyecto de presupuestos.

Todo esto debería estar presentado ante la Unión Europea antes del 15 de octubre. Pero si Rajoy no consigue la investidura se abre un periodo de dos meses para nuevos intentos, al cabo de los cuales habría que volver a convocar elecciones.

Estas tendrían que ser en diciembre. Los dos primeros domingos son del puente de la Constitución y de la Inmaculada, y el último domingo es el día de Navidad. El único domingo sin ninguna fiesta sería el 18. Y para que las elecciones se celebren ese día, la sesión de investidura fallida tendría que celebrarse entre el 22 y el 26 de agosto.

La fecha de la investidura todavía no se ha fijado porque antes, la presidenta, Ana Pastor quiere mantener una conversación con Mariano Rajoy, que todavía no se ha producido.

El lider del PP ha aprovechado la llamada a los líderes de los tres principales partidos políticos, en los que las ha comunicado los pasos y actuaciones que va a llevar a cabo el gobierno en relación al último desafío del parlament de Cataluña, para fijar algunas citas.

El martes a media mañana Rajoy se verá en el congreso con Pedro Sánchez y el miércoles a primera hora lo hará con Albert Rivera.