Pablo Casado y Albert Rivera rechazan cualquier posibilidad de acuerdo con Sánchez tras los pactos en Navarra

La ministra de Educación y Formación Profesional en funciones y portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, ha señalado que hay que asumir "con naturalidad" que "todos los escaños son legales y legítimos", ya que no hay partidos ilegalizados. Y que hay que tener en cuenta la situación tan fragmentada en la que se está en la política actualmente. En este sentido, Celaá ha afirmado que "el PSN ha cumplido estrictamente con su palabra no pactando ni con Navarra Suma ni con Bildu". Además, ha criticado "el cinismo" de PP y Cs, después de ambos partidos "estén pactando con Vox".

La respuesta ante lo sucedido en Navarra, y en otras comunidades y ayuntamientos, reafirma a PP y Cs en su rechazo a colaborar con una abstención en la posible elección de Pedro Sánchez. Para Casado es incompatible estar con EH Bildu en Navarra, donde han conseguido un puesto en la mesa del Parlamento, y al mismo tiempo pedir la abstención de los populares de cara a la investidura. Desde Bruselas, antes de participar en la cumbre del PPE, Casado se mostró “muy preocupado” por la situación vivida ayer en Navarra, un territorio que ya se avisó de que era “el eje de las operaciones del independentismo”.

Para Rivera, Sánchez pisotea "una línea roja" de defensa de la Constitución al permitir que Geroa Bai presida el Parlamento de Navarra con la entrada de Bildu en la Mesa. También desde Bruselas, donde acudió a un encuentro del grupo de los liberales en el Parlamento Europeo, Rivera acusó a Sánchez de utilizar Navarra como "moneda de cambio" para facilitar el apoyo del PNV a su investidura.

A la inversa, el presidente del PNV, Andoni Ortúzar, dice que están dispuestos a hablar, pero sin cheques en blanco. Y el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, dice que están hablando. En la configuración actual, ante una investidura, son necesarios los apoyos o las abstenciones de los nacionalistas, independentistas o Bildu.