No se puede dar un paso atrás ante el avance de la segunda ola de coronavirus en Cataluña. La presión hospitalaria y en UCIs es muy alta y también la incidencia de nuevos contagiados y fallecidos.
Por ello, el gobierno catalán ha decidido prorrogar, al menos por 10 días más, el cierre de toda la hostelería. Con esta restricción trata de evitar los contactos sociales, principal foco de contagio.
Bares y restaurantes de Cataluña llevan cerrados desde el pasado 16 de octubre a pesar de las protestas frecuentes del sector gravemente azotado por la crisis económica derivada de la pandemia de coronavirus.
Otras restricciones
Además también se ha decidido que teatros y gimnasios permanezcan cerrados hasta el 23 de noviembre, pero el gobierno catalán se plantea abrir los centros de estética aunque con restricciones de aforo y horario.
Además sigue vigente el cierre perimetral de Cataluña y cierre perimetral fines de semana por municipios, como hasta ahora.
Los datos no mejoran
Cataluña ha sumado 3.775 nuevos contagios de covid y otros 141 fallecidos notificados en las últimas 24 horas, aunque sigue cayendo muy lentamente la velocidad de transmisión del covid-19 (Rt), que se ha situado este jueves en 0,87, una centésima menos que este miércoles, mientras aumentan el número de hospitalizados.
Según los datos actualizados este jueves por el Departamento de Salud, el número de personas enfermas de coronavirus que están hospitalizadas es de 2.687, un total de 52 más que la jornada previa, aunque han disminuido ligeramente los pacientes graves que están en la UCI, 583, catorce menos que la víspera.
El número de fallecidos desde el inicio de la pandemia es de 14.886 personas en Cataluña, 141 de ellas reportadas en las últimas 24 horas -los óbitos se corresponden a varios días-, en un continúo de más de 50 fallecidos diarios por la enfermedad desde finales de octubre.
La velocidad de reproducción del coronavirus (Rt), que indica la evolución de la pandemia, ha disminuido por decimoquinto día consecutivo en Cataluña, pero lo hace a un ritmo tan lento -hoy ha vuelto a decrecer una sola centésima- que, según los expertos, al menos se tardarán semanas en bajar de los 1.000 contagiados diarios y de los 300 ingresados en las UCI si la curva no se tuerce.