Cómo el mayor atentado de España condicionó las elecciones de marzo de 2004

Un 14 de marzo, pero de 2004, España celebra las novenas elecciones generales desde la transición, las cuales quedaron marcadas por los terribles atentados que habían asolado Madrid tan solo tres días antes, el 11 de marzo.

Unas semanas antes, las encuestas daban como favorito al Partido Popular. Las predicciones posicionaban a los de José María Aznar como primera fuerza política por la mínima. Diferentes polémicas, como la catástrofe del Prestige o el apoyo de España a Estados Unidos en la invasión de Irak, habían provocado una ligera bajada de la popularidad que impediría repetir la mayoría absoluta obtenida en las elecciones del año 2000, pero los buenos resultados económicos con la entrada en el euro y la bajada del índice de paro al 9% generaron una sólida confianza de los electores.

Los candidatos

Además, la promesa de Aznar en las anteriores elecciones de no presentarse a una tercera reelección se cumplió. El elegido para sustituirlo no fue otro que el vicepresidente del Gobierno: Mariano Rajoy.

Por el lado socialista, la segunda derrota consecutiva contra el PP había dejado un mal sabor de boca al PSOE, eran conscientes de que necesitaban renovar su imagen para poder dejar así atrás los casos de corrupción que asolaron a las últimas administraciones de Felipe González. Fue de este modo como apareció un rostro desconocido para la mayoría, José Luis Rodríguez Zapatero. Desde que asumió la secretaría general del partido, Zapatero prometió realizar una "oposición útil", una táctica que llevó al PSOE a firmar junto a los populares el Pacto Antiterrorista. Pero en el ecuador de la legislatura, su discurso se volvió cada vez más contundente según se aproximaban las elecciones.

Y así empezó la campaña electoral. Los lemas de los partidos fueron "Juntos vamos por más" para el PP de Mariano Rajoy, una variación del de las elecciones de los 2000 (Vamos por más), mientras que el PSOE adoptó dos, "Merecemos una España mejor" y "ZP: Zapatero Presidente", este último debido al acrónimo que había recibido el candidato socialista por parte de los medios de comunicación.

Un campaña electoral truncada el 11M

La campaña cursó con normalidad, el Partido Popular parecía acariciar su tercera victoria electoral consecutiva, pero tan solo tres días antes España vivió uno de los eventos más horripilantes de su historia reciente, los atentados terroristas del 11 de marzo de 2004, con 192 fallecidos y más de 1700 heridos tras la explosión de varias bombas en vagones de tren de varias líneas de Cercanías en Madrid.

La sociedad española pudo presenciar frente a sus televisores la crueldad en forma de tragedia, un escenario que parecía irreal. La masacre, junto a la polémica gestión de la información que realizó el Gobierno del Partido Popular, quien indicó en primera instancia que los autores eran miembros de la banda terrorista ETA, sembró la duda. Esta broto cuando los medios de comunicación internacionales comunicaban en sus noticias que, muy posiblemente, fuese el terrorismo islámico de Al-Qaeda quien se encontraba detrás de la masacre.

Desenlace y vuelco electoral

La decisión del Gobierno de Aznar de no suspender y aplazar la jornada electoral, tras tres días de continuo vaivén político, con un país en shock, con manifestaciones masivas en las calles condenando los atentados y con las sedes del PP cercadas por manifestantes, durante la jornada de reflexión previa a las elecciones, que les acusaban de manipular la información sobre los atentados, y Alfredo Pérez Rubalcaba, portavoz del PSOE, afirmando ese mismo día "los españoles se merecen un Gobierno que no mienta", desembocó en los resultados de la jornada electoral del 14 de marzo.

La desconfianza del electorado se hizo oficial con el recuento electoral, el PSOE ganó las elecciones generales de 2004 con un 42,59% de los votos, 164 escaños.

Síguenos en nuestro canal de WhatsApp y no te pierdas la última hora y toda la actualidad de antena3noticias.com

¿Qué partidos apoyan incrementar el gasto en defensa? Así ha sido la ronda de contactos de Sánchez