El ministro de Sanidad, Salvador Illa, comparece en el Congreso de los Diputados para explicar el plan de vacunación establecido para cuando la vacuna del coronavirus esté disponible.
Tras un año muy complejo, ha dicho el ministro: "Empezamos a vislumbrar un horizonte esperanzador. Doblegando la curva por segunda vez y vemos la llegada de nuevas vacunas. Pero quiero ser honesto, es momento muy crítico de la pandemia. Venimos de un puente y debemos seguir manteniendo la prudencia".
Antes del 10 de enero
Illa ha explicado que la vacuna contra la COVID-19 que se administre en España será "segura" y que sólo se administrará aquella que tenga el aval y la autorización de la Agencia Europea del Medicamento (EMA), que está acelerando los procesos para que pueda estar cuánto antes pero con todas las garantías: "Si todo va como se espera, las primeras vacunas autorizadas llegaran a nuestro país en menos de un mes".
El ministro de Sanidad ha querido mandar un mensaje de tranquilidad a los ciudadanos: "La ciudadanía debe estar tranquila. Las vacunas tendrán los niveles de seguridad del resto de vacunas habituales. Este proceso ha sido rápido pero no por ello se han eliminado controles de seguridad, un control extraordinario".
Las vacunas contra el coronavirus estarán a disposición de la población solamente cuando se sepa que son eficaces, seguras y de calidad ha insistido.
Illa avanza que las vacunas de COVID-19 llegarán "en menos de un mes" y defiende su seguridad: "Salvan vidas"
El ministro asegura que la revisión de las vacunas contera el coronavirus por parte de la EMA "se está realizando sin atajos". "Con las mismas medidas que existen habitualmente en otros medicamentos. La diferencia es que la EMA ha puesto en marcha un proceso más ágil, que posibilita la evaluación continuada a medida que se generan los resultados, en lugar de al final del procedimiento, como se iba haciendo hasta ahora. En la UE somos muy garantistas", ha añadido.
Ha defendido en la comisión de Sanidad del Congreso de los Diputados que las vacunas contra el coronavirus tendrán "un control extraordinario" de farmacovigilancia, es decir, de los posibles efectos secundarios o reacciones que se puedan encontrar tras la administración de la vacuna contra la COVID-19. En este sentido, ha recordado la creación de un registro "único y homogéneo" de vacunación junto con todas las comunidades autónomas, y que estará disponible "desde el momento en que lleguen las vacunas".