El fin de los aforamientos y la dimisión del presidente de Murcia, entre los desencuentros del PP y Ciudadanos

En teoría no era solo un apretón de manos. El portavoz parlamentario del PP, Rafael Hernando, habló del "principio de un gran amor". Y los de Ciudadanos estaban esperanzados. Su líder, Albert Rivera calificaba de "fantástico el trabajo en un documento con claro color naranja".

Los populares se comprometían a muchas cosas, pero ahora reconocen que fue porque no había otra salida. En palabras del coordinador general del PP, Fernández Maíllo: "El acuerdo eran lentejas, no había otra opción".

Y decidieron tomarlo. Pero donde dije digo, digo diego. Por ejemplo, acabar con los aforamientos. Esa era la idea inicial, pero ahora para el Gobierno no parece ser lo prioritario. ¿Aforamientos? Nada. ¿Limitación de mandatos? No está previsto. Rajoy lo considera que debe ser una decisión voluntaria.

La evidencia de que la luna de miel se ha terminado tiene que ver con el presidente de la comunidad de Murcia, actualmente esperando a ver en qué queda una investigación sobre un proyecto de cuando era alcalde de Puerto Lumbreras. Ciudadanos pide su dimisión. Rajoy en cambio le defiende, "ya se han archivado 16 causas" contra él.

Se dieron tres meses para aplicar el pacto. Es un momento delicado para el acuerdo