Felipe VI se ha felicitado de que España y Portugal hayan dejado "atrás los tiempos en los que se dieron la espalda" y hoy en día "se den la mano y caminen juntos" como "buenos socios y amigos" que comparten un "firme europeísmo", valores comunes y una misma visión de futuro. El Rey ha asegurado sentirse "profundamente orgulloso" de la relación entre ambos países en su discurso en la cena de gala celebrada en el Palacio Real con motivo de la visita de Estado del presidente portugués, Marcelo Rebelo de Sousa.
Para el jefe del Estado, España y Portugal forman parte "de una misma geografía y están unidas por siglos de historia", un vínculo, ha añadido, que hoy lo ejemplifican sus instituciones democráticas y la sociedad civil y, especialmente, los ciudadanos, que "se aprecian y respetan". "Atrás quedaron los tiempos en los que nos dimos la espalda, y hoy nos damos la mano y caminamos juntos", ha subrayado don Felipe ante el centenar de invitados que han asistido a la cena, entre ellos, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y los líderes del PSOE, Pedro Sánchez, y de Ciudadanos, Albert Rivera.
Rebelo de Sousa ha convenido con Felipe VI en que después de décadas de "diferencias" entre las dos naciones, España y Portugal abrieran "un tiempo radicalmente nuevo" gracias a la llegada de la democracia y su vocación europeísta. Felipe VI se ha mostrado convencido de que la visita de Rebelo de Sousa servirá para "estrechar y reforzar aún más" las ya "extraordinarias" relaciones bilaterales entre dos países que "comparten profundas afinidades asentadas en siglos de historia, en valores comunes y en una misma visión de futuro".
El Rey ha remarcado que España y Portugal son socios en la OTAN con el objetivo de "garantizar la necesaria seguridad del continente europeo y de los aliados". También en la OTAN, ha proseguido, en la búsqueda del "mantenimiento de la paz y seguridad internacionales".
En el plano económico, don Felipe ha recordado que los dos países han sufrido la reciente crisis, aunque "han sabido sacar importantes lecciones". "En la recuperación no podemos dejar nunca atrás a los más vulnerables y debemos aprovechar el crecimiento económico para disminuir las desigualdades sociales, salvaguardando nuestros sistemas de protección social y fomentando la mejora de nuestros sistemas educativos básicos", ha señalado.
A la hora de glosar los vínculos entre España y Portugal, el Rey ha citado la primera circunnavegación de la Tierra, de la que el próximo año se conmemorará el 500 aniversario, ejemplo "de lo mucho que españoles y portugueses han aportado a la historia de Europa y la humanidad". El jefe del Estado ha agradecido la concesión del Gran Collar de la Orden de la Libertad concedido por Portugal, "un aliciente más" para seguir trabajando en beneficio de los dos pueblos.
Rebelo de Sousa, que asumió la presidencia de Portugal en marzo de 2016, se ha mostrado convencido de que la nueva etapa de amistad entre ambos países después de "décadas de reencuentro" es "irreversible". "Es como redescubrirse en profundidad cinco siglos después", ha comparado el político conservador, que ha lucido el Collar de la Orden Española de Carlos III concedida por el Gobierno español.
También ha hecho hincapié en que España y Portugal hayan sabido "encontrar un equilibrio entre identidades propias, fraternidad y convivencia común". Rebelo de Sousa ha agradecido la ayuda que España prestó el pasado verano para combatir los peores incendios vividos en Portugal y ha reiterado su solidaridad por los atentados de Barcelona de agosto.
Además de Rajoy, por parte del Gobierno han asistido la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, y la de Agricultura, Isabel Tejerina.
