Emiliano García-Page, el único dirigente socialista crítico con el Gobierno que no ha sido apartado

Emiliano García-Page es prácticamente el único dirigente socialista crítico con el Gobierno y en el PSOE de hoy en día las voces discordantes acaban siendo apartadas. Figuras emblemáticas del socialismo que se han posicionado contrarios a la amnistía han sido criticados por el aparato del partido.

Felipe González, por ejemplo, fue muy beligerante contra los pactos con los independentistas, también el exvicepresidente Alfonso Guerra o Nicolás Redondo Terreros que llegó a ser expulsado del partido.

Poco antes de que fuera oficial el proyecto ley de amnistía, Pedro Sánchez comenzó a defenderla entre los suyos y sus palabras removieron a históricos del PSOE, que se lanzaron en tromba contra Sánchez. "¿Estamos poniendo en riesgo los cimientos de la convivencia? Temo que sí", opinaba González. Incluso afirmó que le costó votar en las elecciones del pasado 23 de julio.

El expresidente y Alfonso Guerra lideraron un movimiento contra las cesiones de su partido a los independentistas. Guerra pidió "como socialista que eso no lo hagan". Ramón Jáuregui, exministro de la Presidencia, consideró que "supone una legalización encubierta de actos contra el estado que en todo el mundo están penados", opiniones como la de Nicolás Redondo que tuvieron consecuencias, el partido lo expulsó. Esa necesidad es para los más críticos, una fórmula para manejar el partido y fulminar a quien le diga 'no', a su líder.

En el caso de Page la cúpula socialista ha censurado abiertamente al presidente autonómico, aunque Ferraz no se plantea abrirle un expediente de expulsión.

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