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COMIENZA EL JUICIO
El engrasador del Alakrana asegura que los piratas les querían matar de tres en tres
Hoy ha comenzado el juicio por el secuestro del Alakrana en aguas de Somalia en el 2009. En esta primera sesión no han declarado los dos piratas detenidos sino uno de los marineros del atunero que ha reconocido a sus captores, además ha hecho un relato angustioso de ese largo cautiverio. Ha contado como -en muchas ocasiones- la tripulación creyó que iban a matarles. Al preguntarle sobre "si se pagó rescate", ha declarado que vio como una avioneta dejó caer "un cilindro".
A las siete de la mañana del dos de octubre de 2009 comenzaron 47 días de tortura y miedo. Gaiska Iturbe ha dicho que vio pasar la muerte por delante cuando los piratas se encolerizaron al saber que la Armada española había detenido a quienes ahora se sientan en el banquillo. El engrasador del Alakrana ha recordado como los piratas se ponían cada vez más nerviosos a medida que pasaban los días y el Gobierno español no pagaba el rescate.
Llegaron a hacer un simulacro de fusilamiento. El marinero ha roto a llorar otra vez cuando ha recordado el encuentro con el mercante Ariana, los piratas tenían secuestrada a una niña de 14 años y a un recién nacido.
Los piratas no dejaron que los españoles les ayudaran, el bebe murió de hambre y la niña fue violada. El marinero ha dicho que nunca supo si se pagó algún rescate, pero si que vio como una avioneta tiró cerca del barco un paracaídas del que colgaba un cilindro.
Se ha especulado con que dentro podía estar el dinero que exigían los piratas, sobre lo que no ha tenido dudas es en reconocer a los acusados, son quienes durante 47 días le pegaron, le escupieron, le amenazaron de muerte y dejaron destrozada su vida y la de su familia.
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