Gallardón se ha expresado así en el Pleno del Senado, después de que la senadora de CiU Coralí Cunyat dirigiera una pregunta a la ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad Ana Mato para saber si este indulto es compatible con los objetivos de erradicación de la violencia de género.
La parlamentaria catalana ha lamentado que no pudiera conocer la opinión de la ministra y que las políticas de igualdad las marquen, a su juicio, Gallardón y el titular de Interior, Jorge Fernández Díaz.
"Nosotros actuamos con un criterio único, lo cual, militando usted en una coalición como CiU, no me extraña que le cueste entender", ha respondido Gallardón, para defender que el guardia civil no estaba condenado por un delito contra la libertad sexual, sino por omisión del deber de perseguir delitos.
El titular de Justicia ha recalcado que el Gobierno "nunca" ha indultado a ningún condenado por delitos contra la libertad o indemnidad sexual y la última medida de gracia concedida por abuso sexual fue realizada por el Gobierno socialista en 2011 a un condenado a tres años y tres meses de cárcel.
Dicho esto, Gallardón ha enfatizado que el tribunal sentenciador y el fiscal informaron a favor de otorgar la prerrogativa al agente del Instituto Armado, que no tenía antecedentes penales, había satisfecho sus responsabilidades civiles y sobre quien la víctima manifestó su "conformidad" con que obtuviera el indulto.
"Atendimos a las firmas de apoyo, entre ellas la del alcalde de Lena (Asturias) Ramón Argüelles de Izquierda Unida", ha proseguido Gallardón, para añadir que el Gobierno ha recibido 3.147 solicitudes de indulto en delitos de violencia de género, 648 de ellas con informes favorables, y "nunca" los ha otorgado. "El último fue dado por el Gobierno socialista", ha concluido.
El Consejo de Ministros aprobó el pasado 30 de mayo el indulto de un agente del Instituto Armado que había sido inhabilitado en 2013 por mofarse de un abuso sexual mientras la grababa con el móvil. El Gobierno apreció razones de justicia y equidad.
La Sección octava de la Audiencia Provincial de Asturias declaró probado que en la mañana del 11 de junio de 2011 el indultado viajaba con en el tren con destino a Oviedo y se sentó con su amigo junto a la víctima.
Su amigo comenzó a dirigir frases soeces y malsonantes a la chica, a la que tocó la entrepierna por encima del pantalón. La mujer intentó evitarlo, abandonando el lugar, mientras que otro viajero intervino para poner fin al comportamiento del agresor, que le golpeó.
Durante los hechos, el guardia civil estuvo "riéndose permanentemente", sin intervenir en ningún momento, llegando incluso a grabar en su teléfono móvil las palabras que su acompañante dirigía a la víctima y a huir en dos ocasiones de los agentes de autoridad comisionados para investigar el suceso.
La Audiencia de Asturias consideró a Manuel Arbesú culpable de un delito de omisión del deber de perseguir delitos y le condenó a una pena de inhabilitación especial para empleo o cargo público durante seis meses.
El Gobierno le conmutó la pena de inhabilitación por seis meses de multa, a satisfacer en cuotas diarias de tres euros con la condición de que no vuelva a cometer delito doloso en el plazo de dos años desde la publicación del real decreto.