El ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo, ha indicado que aún no están claros los motivos detrás del asesinato de un funcionario de la Embajada española en Jartum, pero la Policía sudanesa sí que ha descartado que se trate de un "suicidio".
"La Policía sudanesa está investigando, se ha descartado al parecer la hipótesis del suicidio porque había un corte en la muñeca y un corte en el cuello", ha explicado el ministro en declaraciones a la prensa, tras participar en un desayuno con el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández.
"Se está investigando cuál pueda ser la causa", ha añadido el ministro, que ha asegurado no tener "más noticias al respecto".
En todo caso, sí ha indicado que se procederá a la repatriación del funcionario, que era el jefe de visados de la sección consular de la Embajada.
"Estamos esperando que termine la investigación y que la policía sudanesa llegue a sus conclusiones", ha anunciado.
Este lunes, su departamento había confirmado la muerte del funcionario, que al parecer falleció apuñalado en su apartamento en Jartum, según la versión ofrecida por el Ministerio del Interior sudanés.
"La Policía del estado de Jartum y sus equipos de investigadores especiales criminales han lanzado una investigación para encontrar al autor o autores lo antes posible", indicó el Ministerio en un comunicado, recogido por el diario 'Sudan Tribune'.
De acuerdo con esta fuente, no hay indicios por ahora que permitan determinar si se trata de un simple homicidio o hay detrás motivos políticos. Por lo que parece, la Policía no ha encontrado signos de que se hubiera entrado a la fuerza en la vivienda ni de robo.
Según aclaró Exteriores, la víctima es un funcionario español de 61 años que llevaba ya tres años desplazado a Sudán, pero no pertenece a la Carrera Diplomática.