Los dos presuntos miembros de ETA detenidos están en prisión preventiva con cargos de pertenencia a organización terrorista. Sobre ambos pesan, entre otros, el cargo de pertenencia a organización terrorista, penado con hasta diez años de cárcel, así como el de robo en banda organizada y falsificación de documentos.
Lariz, de 40 años, es natural del municipio vizcaíno de Markina-Xemein y tiene un largo historial en el entorno de ETA. Se sospecha que fue colaborador del comando 'Kresada', creado en 2005 por orden del exdirigente etarra Garikoitz Aspiazu, 'Txeroki'.
La Policía Nacional le incluyó en su listado de los etarras más buscados en julio del pasado año, cuando se actualizó por primera vez tras el cese definitivo de la violencia decretado por la banda en octubre de 2011.
En aquella renovación de la lista se incluyeron otros miembros históricos de ETA como José Ignacio de Juana Chaos y José Antonio Urrutikoetxea, "Josu Ternera", ambos fugados de la Justicia. También se le atribuye la participación en el ataque en septiembre de 2008 a las dependencias de la Ertzaintza en Ondarroa (Bizkaia).
Urtzi Etxebarria, supuesto miembro de la ilegalizada organización Segi, fue absuelto en 2009 de un delito de colaboración con banda armada, tras ser detenido en 2005 en Guipúzcoa por distribuir "zutabes" -boletín interno de ETA-.
El arresto, que constituye la primera operación antiterrorista que se lleva a cabo durante 2013, tuvo lugar cerca de Nevers, la capital de ese departamento de la región de Borgoña. Al menos uno de los detenidos llevaba una pistola modelo Bauer, que se suele atribuir a integrantes de esa banda terrorista.
