Selectividad

El Gobierno retrasa un año el cambio de modelo de la selectividad

Al estar en funciones, el Gobierno no puede sacar adelante la nueva prueba de EBAU.

Notas de corte para el acceso a la Universidad

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No habrá cambios en las pruebas de selectividad de 2024. Los estudiantes seguirán con el mismo modelo un año más. El Gobierno retrasará un año la reforma de la Evaluación del Bachillerato para el Acceso a la Universidad (EBAU). El Ministerio de Educación y Formación Profesional que dirige en funciones Pilar Alegría ya ha trasladado la decisión a las comunidades autónomas en una reunión telemática.

Al estar en funciones el Ejecutivo, la nueva prueba de acceso no se puede sacar adelante.Se retrasa un año pese a estar "completamente terminada la tramitación del real decreto de la prueba de selectividad. El encargado en comunicar la decisión a las comunidades ha sido el secretario de Estado de Educación, José Manuel Bar.

Asimismo, el Ministerio de Universidades se ha reunido este jueves a las 11:30 horas con representantes de la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE). Estaba previsto que la nueva prueba de selectividad comenzase a realizarse en 2024 para que en 2028 estuviera este modelo ya consolidado. El Ministerio de Educación considera que lo "más lógico" es aplazar el examen para que lo saque adelante el nuevo Gobierno.

¿Cómo es la nueva prueba de selectividad?

El real decreto sobre el nuevo examen de selectividad establece que se elimina la prueba de madurez y las preguntas tipo test. Además, aumenta el tiempo de realización de los ejercicios ya que, según justificó el Ministerio, "se tiene en cuenta la lectura del ejercicio, su análisis y producción". Los alumnos dispondrán de 15 minutos más de tiempo en cada examen en la nueva selectividad.

La nota de Bachillerato se contabilizará con un 60% y con un 40% la de los exámenes de materias comunes y modalidad. Los alumnos podrán realizar dos ejercicios para subir nota y se cogerán las dos máximas notas obtenidas. Mientras, muchos profesores han mostrado su preocupación porque defendían que no tenían las certezas de cómo se realizarían los exámenes y, por tanto, cómo debían preparar a sus alumnos. El aplazamiento "atiende a la petición de un año de moratoria por parte de las instancias universitarias y rebaja la incertidumbre de docentes, alumnos y familias".

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