José Antonio Griñán no optará a la reelección como presidente de la Junta de Andalucía. Él mismo ha explicado que ha meditado "muchísimo" esta decisión y ha señalado que ha elegido este momento para comunicarlo porque considera que es "muy bueno". Griñán se ha pronunciado de esta forma a preguntas de los periodistas antes de participar en la reunión del grupo parlamentario socialista, previa a la celebración del debate sobre el estado de la comunidad, donde se prevé que anuncie oficialmente su
Griñán ha dicho en el debate sobre el estado de la comunidad que un proyecto político de largo alcance "tiene que renovarse permanentemente" y pedirá al PSOE también que estudie la conveniencia de limitar a dos los mandatos presidenciales de la organización y que, "desde el diálogo", puedan convertir esa legislación en norma general y estatutaria.
"Los partidos son los que aseguran la sucesión de las causas, las personas estamos sujetas a la biología", ha añadido Griñán, quien ha recordado que la causa histórica del PSOE "ha sido y es" la lucha por la igualdad, por lo que ahora, "con esa misma voluntad renovadora" tendrá que garantizar que otras personas den continuidad a un proyecto de futuro "desde el compromiso y la constancia".
Griñán, de 67 años, tiene intención de mantenerse como presidente de la Junta durante los tres años que restan de legislatura en un gobierno de coalición con Izquierda Unida y mantendrá la secretaría general del PSOE andaluz y la presidencia del PSOE federal. Mientras, en el partido se abriría un proceso de primarias para elegir sucesor.
Además, Griñán aprovechó su intervención en el debate del estado de la región para proponer que la ley limite los mandatos a dos legislaturas. A su abandono habrían contribuido motivos personales, el escándalo de los ERE fraudulentos y el convencimiento de que ha llegado la hora de renovar el partido.
El expresidente de Castilla-La Mancha José María Barreda ha asegurado que Griñán tenía "muy pensada" y "muy meditada" su renuncia a optar a la reelección y que ya le "había comentado algo durante la semana", a lo cual él le respondió dándole su "apoyo plenamente". "Él me decía: algunos teníamos que dar un paso atrás, conviene que venga gente nueva y yo en Andalucía estoy dispuesto a dar ese paso", ha relatado Barreda en el patio del Congreso.
Preguntado por si la decisión de Griñán puede influir en una decisión similar del secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, el diputado socialista se ha mostrado convencido de que "todo influye en todo".
Al contrario que Barreda, crítico con la dirección de su partido, los dirigentes cercanos a Rubalcaba han reconocido que no conocían la decisión de Griñán. "No lo conozco todavía", ha dicho a su llegada al Congreso el veterano Ramón Jáuregui, mientras que la portavoz parlamentaria, Soraya Rodríguez, ni siquiera se ha parado para ofrecer una declaración a los medios. El madrileño Rafael Simancas, también miembro de la Ejecutiva Federal, ha dicho que tendrá que "escuchar" los motivos de Griñán, al que ha manifestado todo su "respeto" y sus "mejores deseos".
