El presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, ha asegurado este miércoles que puede decir "sin bajar la mirada" que su Gobierno es "honrado", que ha actuado con "contundencia" y que no va a "descansar" hasta recuperar lo defraudado por los ERE irregulares de la Junta.
Griñán ha adoptado este compromiso durante su comparecencia, a petición propia, ante el pleno del Parlamento andaluz para dar explicaciones sobre el caso de los ERE, una intervención que se ha prolongado durante 36 minutos y en la que ha sido interrumpido con aplausos desde de la bancada socialista en cuatro ocasiones, apoyo que no ha secundado IU, socio del gobierno de coalición.
Tras subrayar que no conoce a la mayoría de las personas imputadas por el caso de los ERE y que entre las que conoce no ha hecho "distinción alguna" a la hora de actuar "con firmeza" para el esclarecimiento de este caso, ha asegurado que las responsabilidades "llegarán donde hayan de llegar" aunque "desde la razón y no desde el interés partidario".
Griñán ha indicado que mientras el Gobierno andaluz ha denunciado y ha colaborado con la justicia para llegar al fondo y para que lo más rápidamente posible se castigue a los culpables y se recupere el dinero defraudado, existen numerosas evidencias de que el PP-A sólo tiene un "interés espurio que busca sacar un beneficio partidista" de este caso, sin "que realmente esté colaborando en investigar a fondo el mismo".
Ha señalado que todos los escritos que el PP-A ha presentado en el juzgado que instruye el caso "buscan más implicar a los diversos responsables políticos, obsesivamente a mí, que descubrir a los verdaderos autores del fraude".
Griñán ha manifestado que es su deber y su derecho democrático comparecer, "comprometido con la verdad y con el control parlamentario" y ha indicado que nadie puede decir, sin mentir, que su Gobierno haya dado la espalda a la cuestión; que haya obstaculizado el conocimiento de la verdad, o que haya amparado a personas o cargos públicos que hayan actuado de forma ilícita.
Asimismo, ha señalado que ha pedido comparecer para defender tanto el prestigio de las instituciones andaluzas y de inmensa mayoría de sus representantes públicos como la honorabilidad del PSOE y de sus militantes, "que contemplan con estupor e indignación el cobarde intento de asociar el comportamiento desleal y presuntamente delictivo de algunos militantes con la militancia en general o con la financiación" de este partido, que ha pedido y vuelve a pedir, según ha apuntado, que la Cámara de Cuentas fiscalice la contabilidad de todas las formaciones políticas y no solo de sus campañas.
El presidente andaluz ha expresado en su comparecencia que es totalmente "contrario a judicializar la política", pero que lo es mucho más a "politizar la justicia", algo que, según ha indicado, parece que está ocurriendo en los últimos tiempos.
Griñán ha indicado que no conoce a la inmensa mayoría de los imputados en el caso de los ERE, pero que incluso en los casos que le son conocidos o ha podido mantener una cordial relación política no ha hecho distinción alguna, sino que "en todos los casos", su Gobierno ha actuado con firmeza, con objetividad y sin atender a otro criterio que no fuera el conocimiento de la verdad y la exigencias de responsabilidades, sin "pagarles indemnizaciones millonarias".
El presidente ha advertido, desde la indignación que le produce este caso, que "por mucha tinta que se vierta o por muchas falsedades y mentiras que traten de arrojar" sobre su persona, sobre su Gobierno o sobre el PSOE, "no van a conseguir manchar ni detener unas trayectorias tan limpias y decentes de muchos años".
Griñán ha querido dejar claro además su compromiso con la transparencia y con la necesidad de combatir la corrupción, que "nunca es justificable, sino que merece la condena más rotunda, esté donde esté y afecte a quien afecte". A su juicio, lo peor que se puede hacer es convertir la lucha contra la corrupción en "una arma política" para obtener réditos partidistas o electorales.
Niega la existencia de los fondos de reptiles
Para el presidente, en el transcurso de la investigación de los acontecimientos, "hay algo que ya parece meridianamente claro, como es que no cabe hablar de un fondo de reptiles, sino de desaprensivos que malversaron dinero de un fondo completamente legal tanto en su formulación como en su desarrollo presupuestario".
"No eran ayudas ilegales, no era un fondo ilegal ni un fraude que afectaba a todo un programa presupuestario, sino una mala utilización que ha afectado de forma muy grave e injustificable a una parte de los recursos públicos destinados a paliar las consecuencias de la crisis", ha sentenciado Griñán, quien ha querido dejar claro que el programa de ayudas sociolaborales ha sido eficaz y socialmente útil.