El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha dicho que Castilla-La Mancha, donde la formación morada ha alcanzado un acuerdo de Gobierno a la espera de lo que diga la militancia, "no es un laboratorio, ni un experimento para nadie", y ha afirmado que Podemos está preparado para gobernar a nivel nacional.
En declaraciones a los medios en el transcurso del Consejo Ciudadano Estatal, en el que ha destacado la ausencia de Miguel Urbán o Teresa Rodríguez por su rechazo al acuerdo,
Iglesias ha asegurado que cuando Podemos está en un Gobierno "ofrece garantías" y hace que el PSOE pierda "la tentación de gobernar con el PP, que es lo que, algunos decían, estaba en los planes de García-Page".
Al Consejo Ciudadano Estatal en el que se ha debatido el pacto no han acudido Miguel Urbán o Teresa Rodríguez, que rechazan este acuerdo.
"A mí no me sobra nadie en esta organización" ha insistido Iglesias, que ha valorado que unos compañeros pongan el acento en las "oportunidades de entrar en un Gobierno" y otros lo hagan en "los riesgos".
Iglesias también ha pedido que se entienda que las organizaciones tienen "plena autonomía" para decidir en su territorio y, en el caso de Podemos, la decisión y la soberanía última está en los inscritos.
Y sobre la posibilidad de gobernar a nivel nacional, se ha mostrado abierto a hacerlo con otras fuerzas políticas "sobre la base de un programa que beneficie a las mayorías sociales, termine con los recortes y asuma que España es diversa".
"Somos una fuerza política con vocación de Gobierno" ha insistido Iglesias, y la aspiración de Podemos "es sacar al PP de La Moncloa" y hacer un Ejecutivo "más sensato".
Iglesias ha pedido "respeto" para Castilla-La Mancha, que no es un laboratorio "para nadie", sino "una región en la que sus ciudadanos tienen derecho a que se apliquen políticas públicas que les favorezcan".
El líder de Podemos ha explicado que "estar en un Gobierno" sirve para que todas las medidas que están sobre el papel se conviertan en una realidad, si bien ha dejado claro que la última decisión está en manos del "debate y de los inscritos".