El presidente del PP-A, Javier Arenas, ha abogado este sábado por la "defensa a muerte, con uñas y dientes" de la agricultura y la lucha "sin desmayo" contra la competencia desleal de terceros países en los mercados europeos que perjudica a un sector que, ha subrayado, "es nuestra mejor economía sostenible".
En esta línea, Arenas ha señalado que la gestión en materia agrícola requiere de "una política de Estado" que la convierta en una "prioridad" para el Gobierno desde el debate con otras fuerzas políticas y los países miembros de la UE y ha avanzado que, de obtener la Presidencia de la Junta de Andalucía el 25 de marzo, "sentaré a los partidos y propondré un pacto para que cuando cojamos un avión a Bruselas, estemos todos de acuerdo".
"Cuantas tonterías hemos escuchado estos años sobre la economía sostenible y dónde está ahora ese modelo alternativo de creación de empleo", ha asegurado durante su intervención en la clausura en El Ejido (Almería) de las jornadas 'Industria alimentaria, rentabilidad y empleo' organizadas por el PP-A en las que ha asegurado, en presencia del presidente de la Región de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, que, en la lucha contra la crisis económica, Andalucía y España tienen que saber y aprovechar en que "somos líderes".
Arenas ha trasladado el compromiso "con todas las consecuencias" de los 'populares' con el sector de la agroalimentación, que, ha remarcado, es "sinónimo de futuro y empleo" y ha indicado que, ante la situación socioeconómica actual, se impone adoptar una "estrategia nacional para la defensa de los intereses en Europa y el fomento de la internacionalización" de este sector.
Acuerdo con Marruecos
Con respecto a la Acuerdo de Asociación UE-Marruecos, que el 15 de febrero debe ser sometido a la ratificación de la Eurocámara y que ha calificado de "desequilibrado", ha apuntado que, desde el PP, no se ha manifestado "oposición por definición" sino que se reclama que haya "garantía de cumplimiento del acuerdo". En concreto, ha especificado, urge el cumplimiento de los cupos de entrada ante la "falta de control aduanero" de la UE y la reforma del régimen de control de precios.
"Queremos que nuestra agricultura pueda competir en igualdad de oportunidades y no creo que eso sea pedir el oro y el moro" ha apuntillado para, a continuación, indicar que ni Andalucía, ni Murcia, ni España "tienen que pedir perdón a nadie por producir el tomate de mayor calidad y mayor garantía desde el punto de vista de la seguridad alimentaria".
Arenas, que se ha arrogado para los populares "coherencia" por mantener una postura de rechazo a lo largo de la negociación, ha reconocido que los intentos para frenar la ratificación de acuerdo de liberalización comercial con Marruecos cuenta con el "hándicap" de la gestión realizada en los últimos años por el PSOE y "que nos hemos encontrado sobre la mesa".
Al hilo de esto, ha criticado que la Junta de Andalucía, en una región que es "referente en Europa y su primer suministrador de frutas y hortalizas" tenga "oficina en Madrid y numerosas embajadas", ninguna en Bruselas "donde se cocina gran parte de nuestro futuro". "Los andaluces tenemos menos oportunidades que el resto de los españoles y los españoles, menos que los europeos ya que los socialistas no han llevado a la etapa de mayor desigualdad social y de oportunidades en 30 años de democracia".
Valcarcel pide pacto por el agua
Por su parte, el presidente murciano, Ramón Luis Valcárcel, también ha reprochado al anterior Ejecutivo del PSOE su cambio de postura con respecto al Acuerdo de Asociación UE-Marruecos y que exprese su oposición ahora y "no antes, atacando cualquier posibilidad de que prosperase". Valcárcel, quien ha asegurado que irá "de la manos" del PP-A para "dar batalla y estar a la altura" de un sector "colchón" de la crisis y capaz de "crear riqueza", ha subrayado que el sector "no quiere vivir de la sopa boba de las subvenciones" sino que se le dote de "herramientas".
Ha reclamado, en esta línea, un "gran pacto nacional" por el agua, indispensable para el modelo hortofrutícola, y que ponga término a los "caprichos territoriales y las banderas enarboladas". "La agricultura no puede estar a merced de vaivenes ni se puede hacer dejación de funciones", ha apuntillado en alusión a la gestión en materia hídrica del PSOE ya que, ha añadido, se trata de una "responsabilidad exclusiva que tiene que asumir el Estado y en el que tiene que tomar cartas un gobierno, como lo va a hacer el actual, para no dejarlo en manos de presidentes autonómicos".
Valcárcel ha reclamado la puesta "manos a la obra de todos" para lograr el impulso a un sector que se enfrenta también a la amenaza de la Política Agraria Común (PAC), "que no nos gusta" --ha enfatizado--, en un entorno en el que, pese a que se destruye empleo en la práctica totalidad de los sectores, la agricultura "sigue actuando de auténtico colchón donde se mantiene e, incluso, se incrementa".