El juez Elpidio José Silva ha declarado finalmente en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), por un presunto delito de revelación de secretos por la filtración a la prensa de los correos electrónicos del ex presidente de Caja Madrid Miguel Blesa, una imputación que ha negado.
El juez ha acudido a declarar al TSJM, ante la magistrada Susana Polo, bajo amenaza de detención si no comparecía. Y es que esta era la tercera vez que el TSJM había llamado a declarar a Silva por un presunto delito de revelación de secretos después de que las dos veces anteriores no lo hubiera hecho.
En el día de hoy, Silva sí se ha presentado en el TSJM y en su declaración ha negado haber revelado los correos electrónicos de Blesa, al no tenerlos, según ha explicado a la salida del tribunal su abogado, Gonzalo Boyé.
Boyé ha asegurado que Silva en una "breve declaración", ha defendido ante la juez que los correos del expresidente de Caja Madrid los ha podido revelar cualquiera menos él, que no los tiene.
"Quien sí los tiene es la Fiscalía, el Tribunal Superior de Justicia y la propia instructora del caso, el magistrado Jesús Gavilán o Bankia. Mucha gente los tiene, y probablemente cualquiera de ellos ha podido desvelarlos", ha indicado Boyé.
En este sentido, ha añadido que Silva, en su declaración, solo ha contestado a sus preguntas, ya que "la única parte que estaba legitimada para preguntarle" era el propio Boyé. Y es que según ha dicho, "esta causa no tiene ningún fundamento, y solo es gastar recursos públicos por gastarlos, y por lo tanto se ha decidido que se responda dentro de la lógica y solo ha contestado a mis preguntas que han sido muy extensas y han abarcado toda la causa", ha añadido.
"No estamos dispuestos a participar en un circo como es este procedimiento", ha concluido Boyé.
La primera vez que Silva fue convocado a declarar por la presunta filtración a la prensa de los correos de Blesa, no lo hizo tras pedir la recusación de la instructora de la causa, que ese mismo día rechazó apartarse de la misma, una decisión que el imputado recurrió ante la Sala Civil y Penal del TSJM, que aún debe resolver sobre este asunto.
La segunda vez que Polo convocó al juez, Silva tampoco se presentó. Así, el tribunal madrileño emplazó a la Policía Judicial a que lo citara nuevamente, ya que ese mismo día no había declarado, al no haber podido ser localizado para entregarle en mano la citación, que sí fue notificada a su abogado y su procurador.
Según el tribunal, Silva no asistió "pese a tener completo conocimiento de la cita a la que había sido llamado", por lo que volvió a convocarle para hoy, con el apercibimiento expreso de que, si no comparecía, podría acordarse su detención.
Hasta el momento, la magistrada Susana Polo ha interrogado a ocho testigos que podrían haber sabido que el juez -actualmente apartado de sus funciones por el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ)-, "tenía acceso al contenido de los correos, que estudiaron con él su posible utilidad o que le ayudaron a publicarlos".
Polo acordó estas comparecencias a instancias del Ministerio Público en un auto en el que explicaba que un informe policial apuntaba a que Silva cometió un delito de revelación de secretos por la difusión de los documentos en varios medios de comunicación a finales de 2013.
El próximo lunes Silva deberá asistir nuevamente al TSJM, que le juzgará por un delito de prevaricación, dos contra la libertad individual y uno de retardo malicioso de Administración presuntamente cometidos durante su investigación a Blesa el pasado año.