El presidente de ERC y exvicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, ha afeado al juez del Tribunal Supremo Pablo Llarena, que instruye la causa abierta al proceso soberanista, que considere que la violencia policial del referéndum del 1 de octubre, "la única que se vio en las calles de Cataluña, la protagonizó el Govern o los ciudadanos que votaron".
En un artículo publicado este viernes en el periódico 'Ara', ha reprochado al magistrado que señale al Govern por una violencia del 1-O que las democracias europeas no han visto, ha asegurado: "Lo que todo el mundo ha visto, en todo caso, son las cargas policiales contra ciudadanos pacíficos en los colegios electorales".
"Lo que todo el mundo vio, lo que sacudió la opinión pública y nos conmocionó, fue ver un uso de la fuerza perturbadora contra ciudadanos pacíficos. Por eso millones de personas decidieron hacer huelga el 3 de octubre, en protesta contra el uso de la fuerza", y ha recordado que el PSOE anunció ese mismo día una moción para reprobar a la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sánez de Santamaría, en el Congreso.
Junqueras, en prisión provisional en Estremera desde hace más de 160 días, ha asegurado que Europa, pese a haberse mostrado "fría, distante o claramente contraria a la independencia de Cataluña", ha puesto en duda los presuntos delitos por los que se investiga al Govern cesado, lo que cree que pone en duda la separación de poderes en España y su democracia. "Es el síntoma de un déficit en un sistema de libertades que se convierte en una vulneración flagrante de los principios fundacionales de la democracia", ya que ha señalado que lo que se produjo el 1-O fue una votación y que convocar referendos está despenalizados desde 2005.
Ha defendido que la consulta fue un referéndum y que así se lo contó a Llarena: "La población de Cataluña fue invitada a expresar, pacíficamente y democráticamente, su voluntad sobre el futuro de Catalunya respondiendo a una pregunta muy clara". "No se obligó a nadie a ir a votar y todos los que votaron lo hicieron como siempre se había hecho, pacíficamente", ha insistido el líder republicano, que ha añadido que el derecho a la autodeterminación está reconocido en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y que no renunciará a él.