Un juez de un tribunal de primera instancia de la ciudad belga de Gante ha decidido aplazar al próximo 3 de septiembre la decisión de extraditar al rapero mallorquín Josep Miguel Arenas, conocido artísticamente como Valtonyc, y condenado en España por enaltecer el terrorismo e injuriar al Rey en las letras de sus canciones. La defensa del cantante ha explicado en declaraciones a la prensa que presentarán un nuevo escrito ante el juez en el que argumentarán que los hechos que juzgan se enmarcan dentro de la libertad de expresión, y además no existe la doble incriminación que debe ser exigida para su entrega a España, es decir que los delitos que se le atribuyen al rapero estén tipificados en ambos países.
La decisión sobre la extradición ha sido pospuesta por tratarse de "una cuestión de grandes principios, de libertad de expresión", según ha explicado uno de los abogados del cantante, Simon Bekaert, quien ha asegurado que en los próximos días se presentará el escrito de defensa y la fiscalía responderá a este documento, según prevé el procedimiento legal en Bélgica.
"Estoy contento de poder estar en libertad hoy", ha explicado el artista tras la audiencia, y ha añadido que "los 'jordis', los consellers y los chicos de Alsasua no tienen la suerte de poder tener un juicio justo en España". "Esperemos que Bélgica demuestre ser una Justicia independiente y yo creo que lo va a demostrar", ha zanjado.
El rapero mallorquín vive en Gante desde mayo pasado, cuando concluyó el plazo dado por la Justicia española para presentarse ante la Audiencia Nacional. El 24 de mayo el tribunal español dictó una orden de busca y captura nacional, internacional y europea ante su marcha de España. Dos días más tarde, la fiscalía de Flandes Occidental confirmó que había recibido de las autoridades españolas la euroorden de entrega. El 5 de julio un juez de instrucción belga decidió mantenerlo en libertad condicional a la espera de que otro magistrado estudiase su posible entrega, lo que implica que no puede salir del país.
El músico, de 25 años, explicó el pasado 5 de julio en una rueda de prensa en Bruselas que actualmente vive en Gante, donde ha encontrado un empleo de informático, acorde a su formación, mientras que en Mallorca trabajaba como frutero porque "no encontraba trabajo" en su ámbito, aseguró. "Confío plenamente en la justicia belga y la justicia europea, que está del lado de los derechos humanos y fundamentales. Soy libre y lo puedo decir contento porque ahora haría dos meses que estaría en la cárcel sino fuera gracias al apoyo popular", declaró entonces.