Junts pel Sí (JxSí) ha propuesto a la CUP levantar acta de las reuniones que celebren en busca de un acuerdo que permita la investidura del nuevo presidente de la Generalitat, pero sin que eso implique grabar las conversaciones a puerta cerrada, como sugería la CUP.
Así lo han explicado a fuentes de JxSí, después de que el diputado de la CUP en el Parlament, Benet Salellas haya asegurado esta mañana que había un acuerdo para "grabar el contenido de las negociaciones" y que esas grabaciones serían "custodiadas seguramente" por la presidenta del Parlament, Carme Forcadell.
El presidente de ERC, Oriol Junqueras, se ha mostrado favorable a negociar con "transparencia" y a que haya "más luz" en las conversaciones, por lo que ha asegurado que su partido "no será un inconveniente" si se quiere que las reuniones queden grabadas. No obstante, fuentes de JxSí han negado que exista un acuerdo para grabar las conversaciones discretas que han de mantener en los próximos días ambas partes negociadoras.
La propuesta de JxSí, coalición que agrupa a CDC, ERC e independientes, consiste en reflejar el contenido de las discusiones en un acta de cada reunión que se celebre, textos que deberían ser validados por ambas partes. Este sería, según las fuentes consultadas, un "mecanismo para consolidar lo que ya se ha tratado" en las reuniones y para dejar constancia de lo que plantea cada interlocutor en la negociación.
Negociadores de JxSí y la CUP se reunieron ayer para fijar un calendario de conversaciones con el fin de intentar alcanzar un acuerdo lo más pronto posible, a poder ser antes de las elecciones generales del 20 de diciembre y, en todo caso, antes de que la izquierda anticapitalista celebre su asamblea el día 27 de este mes.
Entre los acuerdos cerrados ayer figura un cambio en el método negociador, ya que se pasa de las diversas mesas de trabajo, con interlocutores específicos asignados en cada una de ellas, a un espacio negociador centralizado, encargado de buscar un acuerdo global.
