El lehendakari, Patxi López, ha afirmado en el 30 aniversario de la Ertzaintza en la Academia de Arkaute, en Vitoria, que "por fin" se ha acabado "con la actividad terrorista" después de muchas vidas "arrebatadas" por ETA.
El máximo representante del Gobierno vasco ha recordado que esto se ha producido después de "mucho sufrimiento". "Han sido muchas vidas arrebatadas y, por eso, nos negamos a que el nuevo tiempo se construya desde el olvido", ha apuntado. En este sentido, ha asegurado que no permitirán que "se rescriba la historia y se diluya la responsabilidad de los asesinos porque, entonces, sería una doble traición", en referencia a las víctimas y al resto de la sociedad.
Además, ha apuntado que la democracia "no es una ciudad amurallada", sino que "tiene puertas que permiten integrar a quienes quieran hacerlo".
El lehendakari ha realizado estas manifestaciones después de que se haya procedido a apagar la llama del pebetero colocado en la Academia de la Ertzaintza de Arkaute en recuerdo a los 15 ertzainas asesinados por ETA y que fue encendido el 23 de diciembre de 1993 por el exconsejero del Interior, Juan María Atutxa, tras el asesinato del sargento mayor de la Policía vasca, Joseba Goikoetxea.
En él constaba una placa con los nombres de todos los agentes muertos y la frase: "Permanecerá encendido mientras exista violencia organizada en nuestro pueblo". En este día, en que se cumple el 30 aniversario de la Ertzaintza, Atutxa ha sido uno de los encargados de apagar la llama del pebetero, junto con el actual responsable de la Policía autonómica, José Antonio Varela, y el hijo de Joseba Goikoetxea.
Posteriormente, se ha procedido a inaugurar un monolito de recuerdo a las 15 ertzainas y los 22 policías locales asesinados por ETA, que recoge el nombre de todos los agentes. En el acto han estado presentes, además, el consejero de Interior, Rodolfo Ares y su predecesor en el cargo, Javier Balza, así como miembros de todas las formaciones políticas con representación en el Parlamento, a excepción de UPYD, que, a través de su parlamentario, Gorka Maneiro, ya anunció que no comparten la decisión de apagar el pebetero cuando ETA no ha desaparecido.
Agentes asesinados
Los agentes de la Policía autonómica muertos a manos de la banda armada son: el teniente coronel, Carlos Díaz Arcocha; el delegado general para Asuntos de la Ertzaintza, Genaro García de Andoain; el sargento, Joseba Goikoetxea; el subcomisario, Mikel Uribe, así como Juán José Pacheco, Luis Hortelano, Alfonso Mentxaka, José Luis González Villanueva, Iñaki Mendiluce, Ramón Doral, José María Aguirre, Jorge Díez Elorza, Iñaki Totorika, Mikel Uribe, Javier Mijangos y Ana Isabel Arostegi.
En cuanto a los policías locales asesinados por ETA son: Eloy García, José María Díaz, Manuel Lemus, Antonio García Caballero, Angel Cruz, Juan Jiménez, César Pinilla, Miguel Chavarri, Pedro Ruiz, Manuel Ferreira, Alfonso Manuel Vilariño, Angel Astuy Rodríguez, Miguel García, Benigno García, José Aybar, Manuel Peronie, José Naranjo, Juan Rodríguez, Vicente Garjate, Alfonso Morcillo, Joseba Pagazaurtundua y Jesús Lolo Jato.