Mientras Carles Puigdemont aspira a liderar el independentismo desde Bélgica, los ocho exconsellers en prisión se plantean un cambio de estrategia con el objetivo de conseguir la libertad con las mismas armas con las que lo ha hecho Carme Forcadell: renegar de la declaración unilateral de independencia.
De momento, los presos del PDeCAT han cambiado de abogados y el letrado de Oriol Junqueras, el mismo que de Forcadell, pide que la causa vaya al Supremo.
Apenas 24 horas después de acatar el orden constitucional ante el juez del supremo, Forcadell volvía a calificar el Parlamento catalán como sede de la soberanía nacional a través de Twitter. Lo hacía, eso sí, después de pagar la fianza que la dejaba en libertad provisional.
La estrategia para salir de prisión le ha funcionado, y eso es lo que quieren repetir ahora los antiguos consejeros del gobierno catalán y su exvicepresidente: volver a declarar ante la juez Lamela, desdecirse, y acatar el articulo 155 de la Constitución.
De momento, los afiliados al PDeCAT han cambiado de letrados para preparar esta nueva maniobra. Todo pasaría por solicitar una vista ante la juez y, esta vez sí, contestar a las preguntas de la Fiscalía. En ese momento, el depuesto gobierno catalán no sólo debería acatar el orden constitucional, también decir que la declaración de la independencia fue algo meramente simbólico.
También deberían renunciar a la actividad política o, si quieren seguir en ella, hacerlo respetando el marco constitucional.
A la espera de que salga adelante la 'vía Forcadell', los nuevos letrados también intentan que el Supremo se haga cargo del caso de los exconsejeros. La Fiscalía tendrá que valorar si se trata de una declaración de intenciones o por el contrario, de una táctica para salir de prisión.
