El Congreso de los Diputados ha abierto este martes la conocida como Puerta de los Leones para recibir los restos mortales del que fuera presidente desde 2004 a 2008, el socialista Manuel Marín, fallecido este lunes en Madrid a los 68 años tras una larga enfermedad.
Ha sido por la tarde cuando el Rey ha acudido para visitar la capilla ardiente. Felipe VI ha dado el pésame a la viuda de Marín, Carmen Ortiz, y a sus dos hijas en el Salón de Pasos Perdidos del Congreso, donde se ha instalado el féretro, cubierto con las banderas de España y de la UE.
El Rey ha coincido en la capilla ardiente con el ministro portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, y con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, que también han acudido por la tarde al Congreso para dar su último adiós a Marín.
Tras permanecer unos minutos de pie velando el cuerpo, el jefe del Estado ha firmado en el libro de condolencias situado en la Sala del Escrito contigua al Salón de Pasos Perdidos. El Rey ha definido a Manuel Marín como "un hombre de Estado" que defendió "con pasión" el interés general y la vocación europea de España.
Firma de Felipe VI en el libro de condolencias por el fallecimiento de Manuel Marín | antena3.com
También el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha visitado la capilla ardiente por la tarde. Rajoy ha subrayado que Manuel Marín fue uno de los políticos "más importantes" que ha habido en España en democracia y ha dejado "un ejemplo muy bueno para el mundo".
El jefe del Ejecutivo ha destacado ante los periodistas que el expresidente del Congreso fue "una gran persona, un gran político y alguien capaz de defender los intereses de su país por encima de cualquier otra consideración". Ha remarcado, sobre todo, que Marín fue "un gran europeísta", y Europa es ahora "por fortuna, nuestro presente y nuestro futuro", y ha recordado cómo estuvo en las negociaciones para la entrada de España en la entonces Comunidad Económica Europea.
"Con su esfuerzo, su trabajo, su empuje y su entusiasmo logró que España entrara ahí", ha continuado Rajoy, quien después ha recordado la trayectoria de Marín como presidente del Congreso. También ha hecho referencia al reciente reconocimiento a Marín como doctor honoris causa por la Universidad de Salamanca, junto al presiente de la Comisión, Jean Claude Juncker, en un acto al que el expresidente del Congreso ya no pudo asistir por su estado de salud.
Rajoy, que se ha trasladado al Congreso nada más aterrizar en Madrid procedente de Londres para visitar la capilla ardiente, ha finalizado sus declaraciones subrayando que Manuel Marín fue una "gran persona" y "un gran político". "Aunque algunos no se lo crean, los políticos somos seres humanos. Hoy estoy triste, pero veo que alguien deja un ejemplo muy bueno para el futuro", ha concluido.
Sobre la 12.45 horas, el féretro con los restos mortales de Manuel Marín ha llegado al Palacio de la Carrera de San Jerónimo, donde le esperaba su viuda y sus familiares, a quienes ha acompañado en todo momento la presidenta de la Cámara, la 'popular' Ana Pastor.
Portado por algunos de los policías que custodian el Congreso, los restos mortales de Marín han entrado por la Puerta de los Leones, que sólo abre sus puertas en los actos solemnes a los que asisten los Reyes, en las Jornadas de Puertas Abiertas y para este tipo de ceremonias.
Una vez dentro, los familiares del expresidente del Congreso han sido saludados por los miembros de la Mesa de la Cámara y por los portavoces parlamentarios, que aguardaban en el Salón de Pasos Perdidos, donde se ha instalado la capilla ardiente por Marín.
Hasta ahora, el Congreso ha acogido solo tres capillas ardientes, las de los expresidentes Adolfo Suárez y Leopoldo Calvo-Sotelo, y la del 'padre de la Constitución' Gabriel Cisneros. De este modo, Marín será el primer presidente del Congreso velado en la Cámara Baja.
El político socialista, que formó parte del equipo que en los ochenta negoció la adhesión de España a las Comunidades Europeas, falleció este lunes a los 68 años de edad "tras una larga enfermedad".