Melilla pide formalmente el confinamiento domiciliario, el cierre de colegios y la presencia de la Armada ante el avance del coronavirus

El presidente de Melilla, Eduardo de Castro, ha solicitado por carta tres peticiones a las autoridades competentes en la lucha contra la pandemia del coronavirus: el confinamiento domiciliario, el cierre de colegios y el buque Galicia de la Armada Española, como refuerzo a la UCI del Hospital Comarcal.

Eduardo de Castro ha instado formalmente a Salvador Illa para que habilite a la mayor brevedad posible los mecanismos legales necesarios para activar el confinamiento domiciliario en la Ciudad Autónoma, asimismo pide su mediación con la ministra de Defensa Margarita Robles para que vuelva a la Ciudad el buque Galicia de la Armada Española, como refuerzo a la UCI del Hospital Comarcal. El presidente de Melilla también se ha dirigido de manera formal a la ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celáa, para que "valore la conveniencia de suspender la docencia presencial en los centros educativos de Melilla y, llegado el caso, se tome en consideración el cierre de las instalaciones educativas como medida preventiva de contención de la alarmante expansión del virus Covid-19 en nuestra ciudad".

De Castro argumenta los últimos datos de la evolución de la pandemia del coronavirus que sitúan a Melilla a la cabeza del país en tasa de incidencia de la COVID-19. En una carta dirigida al ministro de Sanidad recuerda que Melilla es, en términos relativos, la región donde más contagios se han registrado de toda España y la que mayor presión hospitalaria padece tanto en planta como en UCI, por lo que le ha solicitado se lleven a cabo medidas "para paliar las carencias del personal sanitario y los refuerzos que garanticen una cobertura de personal adecuada a las necesidades actuales".

El presidente ha trasladado a Salvador Illa todas las medidas que se han llevado a cabo tanto con anterioridad como tras la entrada en vigor del Real Decreto por el que se declara el estado de alarma, si bien le ha manifestado "la obligación de pensar en nuevas restricciones que aunque dolorosas se hacen necesarias para velar por la salud de los melillenses".