Agresión
Un mosso acusado de golpear con la porra en cabeza de manifestante durante el Mobile de 2018 niega hechos
El agente ha asegurado que "no vi nunca a esta persona". Aunque ha reconocido que hizo uso de la porra "varias veces" tras recibir la orden de un mando superior.
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Un mosso d'esquadra acusado de golpear con su porra en la cabeza de un manifestante en una protesta contra la presencia del rey en Barcelona en febrero de 2018 ha negado este lunes los hechos. El suceso tuvo lugar durante la visita del rey con motivo del Mobile. El agredido, de 60 años en ese momento, sufrió una herida abierta en la cabeza que requirió siete puntos de sutura.
El agente ha negado que golpeara al hombre y ha asegurado que no ha visto nunca, aunque ha reconocido que utilizó la porra en su defensa "varias veces" tras recibir la orden de un mando superior y "siempre" lo hizo de "cintura hacia abajo". Según el mosso, los concentrados derribaron las vallas de protección y lanzaron "todo tipo de objetos" a los agentes de los Mossos como "piedras, palos, pilas y latas". Ha negado que los agentes desplegados en ese operativo policial cargasen contra los manifestantes, y ha afirmado que hicieron maniobras de "contención y defensa" porque el "nivel de riesgo era alto o muy alto".
La víctima ha asegurado que la manifestación era "pacífica y tranquila" y "sin ningún tipo de provocación ni advertencia". El hombre ha apuntado que el agente le dio un golpe en la cabeza que le dejó "medio inconsciente". Ha afirmado que el golpe de porra que recibió "fue de arriba hacia abajo", con un "impacto importante" en la cabeza. La víctima ha rebatido las explicaciones del acusado, al negar que los manifestantes derribasen las vallas o arrojasen objetos a los agentes y, en su caso concreto, ha señalado que su actitud en ningún momento fue "hostil".
Declaración de los testigos
Dos de los testigos aportados por la defensa han corroborado la versión de la víctima, al afirmar que el hombre recibió un "golpe directamente en la cabeza" con una porra que impactó "de arriba hacia abajo", y han identificado al acusado como el agente de los Mossos que utilizó su defensa contra este manifestante.
La fiscal, en sus conclusiones iniciales, sostiene que el encausado "esgrimió su defensa policial semirrígida alcanzando con ella en la cabeza" del hombre, lo que sería constitutivo de un delito de lesiones "agravado por el empleo de instrumento peligroso", pero pide la absolución del agente de los Mossos, tanto en la responsabilidad penal como en la civil, al aplicar la eximente completa de "obrar en cumplimiento de un deber".
La médico forense que atendió al hombre ha explicado que este presentaba una herida abierta de cinco centímetro de longitud en cuero cabelludo, contusa y cortante, compatible con la porra del agente que consta en la causa, de 70 centímetros, aunque también con otros objetos que pudieran haber impactado de manera directa en el lugar en el que presentaba la lesión. El juicio proseguirá el próximo 23 de febrero con los testigos de la defensa, varios agentes de los Mossos, y las conclusiones finales de las partes.
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