Negociaciones
ERC y PSC ultiman las negociaciones para allanar el camino hacia la investidura de Illa
Una semana crucial para ultimar las negociaciones entre ambos partidos.
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Los equipos negociadores del Partido de los Socialistas de Cataluña (PSC) y Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) están en contacto constante para intentar acelerar un acuerdo que permita la investidura de Salvador Illa como presidente de la Generalitat. Fuentes de ambas formaciones, consultadas por Europa Press, han confirmado que aunque el acuerdo aún no está cerrado, existen riesgos de que las negociaciones puedan encallar en cualquier momento.
Esta semana es crucial para ultimar las negociaciones, especialmente después de que ERC advirtiera que se levantarán de la mesa si no hay un preacuerdo antes de finalizar julio. Los republicanos aseguran que las reuniones son constantes y que aún quedan aspectos por cerrar, especialmente en el ámbito de la financiación, instando a los socialistas a mostrar más flexibilidad.
ERC ha convocado una ejecutiva el lunes próximo para explicar los avances en las negociaciones ante un posible acuerdo con los socialistas. Si se cierra el acuerdo, los republicanos tienen previsto someterlo a votación de la militancia mediante una consulta telemática. Desde el PSC, las fuentes muestran un optimismo prudente, conscientes del riesgo de que las conversaciones puedan estancarse.
Mientras tanto, el partido Junts ha organizado un acto este sábado en el sur de Francia para apoyar la posible vuelta del expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, a Cataluña. Este evento añade una presión adicional a las negociaciones en curso.
El contexto de las negociaciones
Desde que los catalanes acudieron a las urnas el pasado 12 de mayo, el PSC ha trabajado intensamente para conseguir una mayoría parlamentaria que permita a Salvador Illa liderar la Generalitat. Las conversaciones y reuniones han sido constantes, siempre bajo la máxima discreción, con el objetivo de alcanzar un acuerdo con ERC que esta semana entra en su fase final.
Aunque el plazo para lograr un acuerdo se extiende hasta el 26 de agosto, cuando termina el periodo para investir un candidato, la secretaria general de ERC, Marta Rovira, ha fijado finales de julio como la fecha límite para llegar a un pacto con los socialistas. Con menos de dos semanas restantes, ERC ha dejado claro que se retirarán de las negociaciones si no hay avances significativos.
Las exigencias de ERC y la respuesta del PSC
En un artículo de opinión, Marta Rovira ha subrayado que ERC hará valer sus votos y mantendrá sus tres objetivos intactos: soberanía fiscal, referéndum y el relanzamiento de la lengua catalana. Rovira ha advertido que no aceptarán promesas vagas de financiación y que Cataluña necesita un cambio de modelo financiero estructural, permanente e irreversible.
Rovira ha insistido en que cualquier acuerdo de investidura debe incluir la organización de un referéndum con verificadores internacionales y fomentar el uso social del catalán, así como del modelo de escuela catalana y la acción exterior. Si el PSOE no cumple estos acuerdos, ERC se retirará de la mesa de negociaciones.
Por su parte, la portavoz del PSOE, Esther Peña, ha calificado de "maximalismo" las exigencias y el ultimátum de ERC, subrayando la seriedad y discreción con la que el PSC ha llevado a cabo las negociaciones. Peña ha reiterado que el PSC sigue confiado y optimista sobre la posibilidad de alcanzar un acuerdo que permita a Salvador Illa liderar la Generalitat.
El PSOE ha mostrado gestos de buena voluntad, como la transferencia de Rodalies, cumpliendo con acuerdos previos para la investidura de Pedro Sánchez. Sin embargo, ERC destaca que, para ganar su apoyo, es fundamental generar confianza, algo que se ha visto afectado por incumplimientos recientes del PSOE. Aunque las negociaciones están avanzadas, aún quedan aspectos importantes por resolver.
Cuatro áreas principales
Las discusiones se centran en cuatro áreas principales: la resolución del conflicto, la financiación singular para Cataluña, el fomento del catalán y las políticas republicanas. Estas áreas contienen numerosos matices que deben ser abordados para lograr un acuerdo sólido. La financiación es especialmente crucial, ya que ERC insiste en una financiación singular que garantice recursos adecuados para Cataluña.
Las negociaciones diarias varían, y aunque el suelo de las demandas de ERC es alto y el techo del PSC es bajo, hay margen para encontrar un entendimiento. "Es fundamental que el acuerdo final sea beneficioso para Cataluña y asegure los recursos necesarios para su desarrollo", insisten. Los equipos negociadores siguen trabajando en los detalles, y aunque hay movimiento y voluntad de entendimiento, aún no se puede hablar de un acuerdo completo. Un posible preacuerdo debe ser validado por la militancia de ERC, un paso crucial en este proceso.
ERC insiste en la necesidad de recaudar el 100% de los impuestos y en que este aspecto esté blindado desde el punto de vista legal. aseguran que no puede depender de la buena voluntad de un presidente que necesite sus votos, sino que debe ser una garantía legal. Cualquier partido que aspire a presidir la Generalitat debe reconocer y abordar la infrafinanciación que sufre Cataluña, y el PSC debe demostrar un compromiso real con la ejecución presupuestaria en la región.
Las próximas semanas serán decisivas para determinar si Salvador Illa puede asumir la presidencia de la Generalitat. Con ambos partidos comprometidos en alcanzar un acuerdo, el tiempo apremia y las demandas de ERC ponen a prueba la capacidad de negociación del PSC. Los resultados de estas negociaciones no solo definirán el futuro político de Cataluña, sino también ayudará a dilucidar el panorama político en España.
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