Será el martes cuando se conozcan el nombre y el logotipo del nuevo partido, que establecerá un modelo organizativo inédito en la historia de la izquierda abertzale, pues tendrá un Congreso como máximo órgano, así como una Asamblea Nacional, una Ejecutiva y un secretario general, y contará con afiliados, figuras todas ellas inexistentes en Batasuna y en las formaciones que la antecedieron, según ha informado el diario Gara.
El acto de este lunes, que tendrá lugar a partir de las 11:00 horas en el Palacio Euskalduna de la capital vizcaína, ha sido organizado por el colectivo Lokarri (Red Ciudadana por el Acuerdo y la Consulta). "Vamos a organizar un acto inusual en la historia de Lokarri para poner énfasis a lo que nos parece podría representar un paso de indudable trascendencia en el logro de la paz", ha asegurado este colectivo.
Tras una breve presentación de un miembro de Lokarri, corresponderá al histórico dirigente de la izquierda abertzale Rufi Etxeberria dar a conocer "las razones políticas" que han llevado a este sector a plantear la creación de un nuevo partido. Después será el abogado Iñigo Iruin quien desgranará los detalles del contenido jurídico de los estatutos, que serán inscritos el próximo miércoles en el registro de partidos políticos del Ministerio de Interior en Madrid.
El portavoz abertzale Txelui Moreno, que habló este sábado de la presentación del nuevo partido, asegura que los estatutos respetarán "las leyes que hoy rigen" en España "para poder ser legales", en alusión a la Ley de Partidos. La incógnita estriba en si la izquierda abertzale de Batasuna, partido ilegalizado por el Tribunal Supremo en 2003 al considerarlo el brazo político de ETA, mencionará expresamente a la organización terrorista, tal como demandan el Gobierno y buena parte de las formaciones políticas.
Al acto de este lunes en el Euskalduna acudirán como invitados representantes de formaciones políticas como PNV, Aralar, EA, EB y Alternatiba. El PNV, que ha adelantado que enviará "por cortesía" a cinco representantes, ha sido criticado por ello por el PSE-EE. El PP mantiene que todos los movimientos de Batasuna obedecen a su deseo de presentarse a las próximas elecciones y ha pedido que nadie la "resucite".