El grupo terrorista Daesh utiliza a las mujeres para que den a luz a niños que continuarán con su lucha. Se trata de los cachorros del Daesh: niños que ya nacen en las filas y que son entrenados desde pequeños, como es el caso del primer bebé español nacido en el Califato, cuya foto resulta impactante, ya que lo muestran rodeado de armas.
Un adoctrinamiento desde la infancia que también ocurre en España. Es el caso de un niño que sin haber cumplido los dos años su padre lo entretiene con un vídeo de terroristas que le llama la atención. El pequeño se divierte viendo morir a combatientes.
Un agente revela los impactantes casos de niños menores de cinco años a quienes sus padres les hablan de los líderes de Daesh como ejemplos, como si se tratara de un tema apropiado para los más pequeños.
Este adoctrinamiento a menudo acaba en el campo de batalla, como es el caso del español más joven que lucha en Siria. Se trata de Oussama, un madrileño de 15 años que posa sonriente con un sable en la mano en una fotografía.
Es el hijo de uno de los ideólogos de los atentados del 11-M, un menor de edad predestinado desde la cuna a terminar en la yihad y cuyas imágenes se pueden ver por primera vez.
La familia de Oussama celebra su llegada al mundo en una humilde casa del poblado marginal de la Cañada Real, en las afueras de Madrid, donde convivía con sus hermanos Zaid y Mossab. El día de su nacimiento, su padre, Mustapha, un albañil de origen marroquí y religioso invita a sus amigos más cercanos para rezar por el futuro del niño: un futuro que ya está escrito.
A esa fiesta acuden los que tres años más tarde cometerían los atentados de Madrid, el fundador de Al Qaeda en España, y a quien dio la orden de atacar en Madrid. También estuvo presente en la celebración uno de los terroristas que más tarde se inmolaría en Leganés: se trata del tío político del bebé. Allí comenzó el germen del 11-M.
El niño crece viendo la figura de su padre como la de un mártir e incluso se fabrica un Kalashnikov de papel hecho por el mismo para jugar.
Tras cumplir condena por los atentados de Casablanca, el padre de Oussama se ha llevado a Siria a sus tres hijos para combatir en la Yihad. El hermano mayor ha fallecido en combate. El mediano también podría haber muerto y de Osama no hay noticias desde hace meses.
