Pablo Hásel
Pablo Hasél: ¿Qué dijo? ¿Qué hizo? Los antecedentes del rapero que llevaron a su encarcelamiento
El rapero catalán fue detenido el martes en Lleida. Está condenado a prisión por enaltecimiento de terrorismo e injurias a la Corona. Resumimos por qué ha sido condenado.
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La detención del rapero Pablo Hasél esta semana en Lleida ha avivado la tensión social en las calles, pero también ha dividido a la clase política española.
Pablo Hasél ingresó en prisión el martes tras ser condenado por los delitos de enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona, cometidos tanto en las letras de sus canciones como en mensajes publicados en sus Twitter. Este jueves, la Audiencia Nacional de Lleida ha confirmado otra condena por amenazar a un testigo en un juicio.
El caso de Pablo Hásel ha reabierto el debate sobre la libertad de expresión en la sociedad y la clase política. Pero, ¿por qué ha sido condenado?
Estos son los antecedentes de su encarcelamiento:
Letras polémicas en sus canciones
Pablo Rivadulla nació hace 32 años en Lleida y debutó en el rap español en el año 2006, con canciones con crítica social y tono anticapitalista.
En 2011, Pablo Hasél tuvo su primer encontronazo con la Justicia, cuando fue detenido acusado de apología del terrorismo por las letras de sus canciones. Posteriormente fue puesto en libertad, aunque en 2014 la Audiencia Nacional lo declaró culpable de enaltecer el terrorismo de ETA, los Grapo, Terra Lliure o Al Qaeda.
"¡Merece que explote el coche de Patxi López!", "es un error no escuchar lo que canto, como Terra Lliure dejando vivo a Losantos", o "quienes manejan los hilos mjerecen mil kilos de amonal", fueron algunas de las estrofas que le valieron una condena a dos años de prisión en 2014.
Cuatro años después, la Audiencia Nacional volvió a juzgar al rapero por los delitos de enaltecimiento del terrorismo, calumnias e injurias a la Corona y a las fuerzas de seguridad. La Justicia revisó una canción y 62 tuits escritos entre 2014 y 2016 y le condenó a ocho meses de prisión.
Estas son algunas de las letras que le han llevado a prisión:
- "No me da pena tu tiro en la nuca, pepero. Me da pena el que muere en una patera. No me da pena tu tiro en la nuca, socialisto".
- "Prefiero grapos que guapos. Mi hermano entra en la sede del PP gritando ¡Gora ETA! A mí no me venden el cuento de quiénes son los malos, sólo pienso en matarlos".
- "Los amigos del reino español bombardeando hospitales mientras Juan Carlos se va de putas con ellos".
- "Por más millones que inviertan en manipulación, por más que sean "intocables", la monarquía pasará a la historia como los parásitos que son".
Más de 62 tuits juzgados
Un total de 62 tuits publicados entre 2014 y 2016 fueron revisados por la Audiencia Nacional. Antes de su entrada en prisión, Hasél recopiló en la red social algunos de sus mensajes más polémicos, muchos ya eliminados de su cuenta:
- "Policías que con Franco encarcelaban y que ahora encarcelan como jueces de la Audiencia Nazi-onal".
- "Pretenden ocultar que muchas personas han salido hoy a exigir el fin de la monarquía fascista y golpean hasta a periodistas".
- "Dos años desde que Iñigo Cabacas fue asesinado por la policía sin que haya habido condenados por ello".
- "Policía Nazi-onal torturando hasta delante de las cámaras".
- "Joseba Arregi asesinado por la policía torturándolo".
- "Por culpa de Arabia Saudí los niños en Yemen sufren así. Cosas de los amigos demócratas de los mafiosos Borbones".
Pablo Hasél, condenado por asaltos, amenazas y agresiones
Pero más allá de sus mensajes, Pablo Hásel también ha protagonizado otros desencuentros con las autoridades.
En 2016 agredió a un periodista de TV3 en la Universidad de Lleida durante un encierro de protesta. La agresión le costó una condena a seis meses de cárcel y una indemnización de 12.000 euros a la víctima.
Este mismo jueves, la Audiencia de Lleida ha confirmado otra condena de dos años y medio por amenazar a un testigo de un juicio contra unos guardias urbanos en Lleida.
Además, el rapero tiene otra causa abierta por su presunta participación en el asalto a la subdelegación del Gobierno de Lleida en 2018 durante una protesta contra la detención de Carles Puigdemont.
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