Reunión de la comisión del Parlament de Cataluña sobre los atentados yihadistas de agosto de 2017 en Barcelona y Cambrils (Tarragona) para debatir el dictamen con sus conclusiones, antes de elevarlo al pleno de la cámara para su aprobación definitiva. Los miembros de la comisión tendrán que votar las diferentes propuestas sobre lo sucedido, desde hechos contrastados hasta si admiten algunas aportaciones como las que incorporaba el grupo del presidente de la Generalitat, Quim Torra, JxCat, dando d a entender una cierta teoría de la conspiración, según la cual el CNI, los servicios secretos españoles, tenían conocimiento previo de lo que podía pasar, ya que uno de los implicados, Es Satty, había sido su confidente. Una teoría que no ha sido comprobada por ninguna información conocida.
Pánico en Las Ramblas
Se trata de aprobar unas conclusiones sobre lo sucedido en el verano de 2017, una serie de ataques terroristas en Barcelona y Cambrils. El 17 de agosto en Las Ramblas de Barcelona se cometió un atropello masivo con una furgoneta que recorrió 530 metros en la zona central, frente al mercado de La Boquería. Estado Islámico reivindicó el atentado. Murieron 15 personas, entre ellos dos niños de tres y siete años, y hubo decenas de heridos, cinco de ellos en estado crítico. Uno de ellos, una turista alemana de 51 años, falleció diez días después. El conductor de la furgoneta, Younes Abouyaaqoub, logró escapar a pie cruzando el mercado de la Boquería y caminando por toda Barcelona hasta la Zona Universitaria. Cuando Pau Pérez Villán, de 35 años, estaba estacionando su coche en el aparcamiento de la Zona Universitaria, Younes le apuñaló y más tarde murió desangrado en el coche, que utilizó Younes para salir de Barcelona, arrollando por el camino a un mosso d'Escuadra.
Horas después del ataque de Barcelona, por la noche, se produjo otro atentado en Cambrils. Cinco presuntos terroristas fueron abatidos tras intentar saltarse un control policial y atropellar a seis personas, tres de ellas mossos. Una séptima persona fue herida en la cara por ataque de uno de los terroristas, que logró recorrer unos metros antes de ser también abatido. Una de las mujeres apuñaladas en Cambrils murió horas después.
En el juzgado
Paralelamente, en el ámbito judicial, la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), personada como acusación popular en la causa abierta por los atentados, acusará a los tres imputados por los 16 asesinatos cometidos por la célula yihadista a la que supuestamente pertenecían, pese a no haber sido procesados por este delito. Driss Oukabir, Mohamed Houli Chemal y Said Ben Iazza fueron procesados por el Juzgado Central de Instrucción número 4 por integración en organización terrorista, fabricación, tenencia y depósito de explosivos y delito de estragos en grado de tentativa, y la conclusión del sumario fue avalada la semana pasada por la Sala de lo Penal. El instructor reconocía en su auto de procesamiento que el objetivo de la célula terrorista a la que supuestamente pertenecían los tres imputados era el de cometer varios atentados mediante el uso del explosivo que estaban fabricando en la vivienda de Alcanar (Tarragona), pero la explosión que se produjo el 16 de agosto en ese lugar "frustró e imposibilitó la posibilidad de seguir adelante con los planes terroristas trazados". Así, el magistrado concluía que no hay indicios de que Houli, Oukabir e Iazza -quienes llevan ya casi tres años en prisión preventiva- hubieran conocido o participado en los nuevos planes delictivos adoptados por el resto de los integrantes de la célula, todos ellos abatidos tras la comisión de los atentados.
No obstante, fuentes de la AVT consideran que el hecho de que no se haya procesado a los tres detenidos por los asesinatos terroristas de las 16 personas que murieron en el atropello de la Rambla y el tiroteo en Cambrils no significa que no se les pueda acusar de ello, y recuerdan que hay jurisprudencia del Tribunal Supremo al respecto.