Pedro Sánchez defiende que la UE exija una pausa humanitaria en el conflicto entre Israel y Hamás

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, vuelve a enfocarse en el plano internacional después de firmar este martes el pacto para un Gobierno de coalición con Sumar. Sánchez, en su intervención en el museo Reina Sofía, ha prometido que España tendrá más voz y peso internacional, y ha defendido los logros de la presidencia española del Consejo de la Unión Europea, que ha alcanzado su ecuador.

En ese contexto se celebra esta semana -jueves y viernes- la cumbre de otoño de los líderes de los veintisiete países de la UE, que mantendrá a Sánchez, como es habitual, durante dos días en la capital comunitaria. Pero el presidente español se sumará ya este miércoles, como país que ostenta la presidencia de turno, a la llamada Cumbre Social Tripartita. Se trata de un foro de diálogo entre las instituciones de la UE, representadas por los presidentes del Consejo y la Comisión, Charles Michel y Ursula von der Leyen, y responsables de asociaciones y confederaciones europeas de empresarios y sindicatos. También estarán presentes los ministros de Empleo de España, Bélgica y Hungría.

Sánchez y Díaz coinciden en la cumbre

Por tanto, Sánchez coincidirá en Bruselas con su vicepresidenta segunda y responsable de Trabajo en funciones, Yolanda Díaz, un día después de rubricar el acuerdo entre PSOE y Sumar. Sánchez ha intervenido en rueda de prensa al finalizar la cumbre y acudirá a una cena que ofrece la presidenta de la Comisión.

Antes de la cumbre europea del jueves, el jefe del Ejecutivo acudirá a la reunión previa de los líderes socialistas de la UE y participará en la clausura de una reunión de la Global Gateway, un proyecto comunitario para impulsar inversiones geoestratégicas en socios de todo el mundo.

"Pausa humanitaria" o "alto el fuego"

Entre los asuntos que tratarán en su cumbre los jefes de Estado o de Gobierno de los Veintisiete hay un apartado dedicado a analizar conflictos internacionales. La intención es volver a reiterar el total apoyo a Ucrania, y será la primera vez que los Veintisiete intercambien puntos de vista cara a cara sobre el conflicto entre Israel y Hamás, ya que abordaron este asunto la semana pasada por videoconferencia.

Es seguro que en las conclusiones del Consejo habrá una referencia a lo que está ocurriendo en Oriente Medio, pero queda por definir de qué forma. Fuentes del Gobierno señalan que a la delegación española le gustaría que quedara plasmado algo en la línea de una llamada a una "pausa humanitaria" que permitiera la entrada de ayuda en Gaza. Esa expresión ha generado debate entre los ministros de Exteriores del bloque comunitario, donde algunos países, como España, abogan por un "alto el fuego", una expresión que puede implicar un cese de hostilidades más duradero.

Sánchez ya se sumó el pasado sábado en la cumbre internacional de El Cairo sobre el conflicto Israel-Hamás al llamamiento del secretario general de la ONU, António Guterres, para que haya un alto el fuego humanitario que permita la entrada de ayuda en Gaza.

La posición española incluye la defensa de la coexistencia de dos Estados, Israel y Palestina, junto a la condena del ataque terrorista de Hamás en Israel, el reconocimiento de este país a defenderse, pero siempre de acuerdo al derecho internacional, y la exigencia de liberación de todos los rehenes, entre ellos el español Iván Illarramendi. Sánchez, como presidente de turno del Consejo de la UE, apelará en Bruselas a la unidad de los Veintisiete ante el conflicto de la misma forma que ha habido unidad sobre Ucrania.

Otro de los asuntos que se abordarán en la cumbre será el pilar social europeo, cuestión ante la que Sánchez pondrá en valor los esfuerzos de la presidencia semestral española para el avance de las políticas sociales. Los líderes de la UE debatirán también, entre otras cuestiones, sobre la revisión del marco financiero plurianual, la próxima cumbre del clima COP28 de Dubai y el problema migratorio.

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