El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y los ministros de su gabinete se han sometido por vez primera al control parlamentario del Senado en una sesión en la que el jefe del Ejecutivo se ha enfrentado a preguntas de los portavoces del Partido Popular, PNV y Coalición Canaria. Entre los temas tratados, el sistema de financiación autonómica y Sánchez ha asegurado que no hay "tiempo material" en esta legislatura para poder reformarlo en su conjunto, aunque el Ejecutivo tiene la intención de hacer mejoras de la financiación de todas las comunidades.
Sánchez ha respondido en estos términos a la senadora de CC María del Mar del Pino Julio Reyes, que le había preguntado sobre los plazos del Gobierno para los compromisos de la agenda canaria en la sesión de control al Ejecutivo del pleno del Senado. El jefe del Ejecutivo ha dicho que hay que ser "ambiciosos" con la financiación autonómica, pero también "realistas", y que no se podrá renovar en su conjunto todo el sistema porque no hay "tiempo material".
Sánchez pide al PP que se limite a hacer oposición al Gobierno, pero no al Estado
En otro momento de la sesión, Sánchez ha pedido al PP que se limite a hacer oposición al Ejecutivo, pero no al Estado, demostrando así al menos la misma lealtad que tuvo el PSOE para con el Gobierno de Mariano Rajoy desde la oposición. El jefe del Ejecutivo ha lamentado que el PP, desde el debate de la moción de censura que desalojó a Rajoy del poder, intente "suscitar dudas" con respecto al compromiso demostrado por el PSOE en defensa de la Constitución.
Sánchez respondía a una pregunta del portavoz del PP en el Senado, José Manuel Barreiro, que ha expresado su temor de que el Gobierno de Sánchez, apoyado por partidos independentistas y nacionalistas, no sea capaz de garantizar la cohesión territorial de España.
Sánchez rechaza el efecto llamada por la acogida del Aquarius
Sánchez tambiémn se ha referido a la acogida de los 629 inmigrantes y refugiados del buque Aquarius y ha afirmado que "no es una cuestion de efecto llamada", sino que es "una cuestión de efecto huida de la realidad de desigualdad, pobreza y falta de oportunidades" en los países de origente de los migrantes.
Preguntado por las iniciativas que tiene previsto plantear ante la Unión Europea para abordar de manera conjunta la situación en las aguas del Mediterráneo, el jefe del Ejecutivo ha recordado las palabras de la excomisaria europea Enma Bonino --"una voz autorizada en cuestión de migraciones", ha añadido Sánchez-- para rechazar que se hable de efecto llamada tras la acogida del Aquarius. Según ha explicado Sánchez, ella dijo que "los políticos que hablan de efecto llamada ni han puesto un pie en Africa, ni se han encontrado en su vida con un refugiado".