El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, ha admitido que la comunicación sobre el Ingreso Mínimo Vital "se podría haber hecho mejor", en referencia a la presentación de la medida. Se ununción y al final no se ha hecho. En declaraciones en laSexta, Iglesias afirmó que a su juicio habría sido "lógico que Escrivá y yo saliéramos" a explicar la medida, en tanto que sus departamentos son los que trabajan en ella. Esto también serviría para "acallar las voces" de quienes buscan ponerlo en duda, afirmó Iglesias. Por otro lado, reconoció que ha habido "un debate de tiempos" dentro del ejecutivo y que, gracias al acuerdo que alcanzó con el presidente Pedro Sánchez, finalmente se pondrá en marcha en mayo. "Mi equipo y yo nos dejaremos la piel para que se pueda cobrar lo antes posible" y que sea efectiva desde mayo, insistió.
Este reconocimiento del vicepresidente segundo de Derechos Sociales, de que todavía quedan reuniones con el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones de José Luis Escrivá para "terminar de definir todos los detalles" del Ingreso Mínimo Vital, lo ha hecho en un mensaje en redes sociales que ha difundido después de que el ministro de Inclusión afirmara que se ha enterado por la prensa de que se iba a presentar esta nueva medida, que el Gobierno va a lanzar en mayo: "Todo está listo para que, en las próximas horas, los equipos de la vicepresidencia de Derechos Sociales y del ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones mantengan nuevas reuniones, como llevamos teniendo ya desde hace días, para terminar de definir todos los detalles de este sistema de protección social, que está llamado a convertirse en un nuevo derecho social nuclear de nuestro estado del bienestar y de nuestra democracia", ha asegurado Iglesias en su mensaje, en el que ya no se menciona ninguna presentación ante la prensa.
Tiras y aflojas
Esta prestación lleva siendo objeto de un intenso debate en el seno del Gobierno desde hace semanas, con Unidas Podemos presionando para sacarla adelante de forma urgente, aunque fuera con un formato provisional, como un "Ingreso Mínimo Vital Puente", para paliar los efectos de la crisis del coronavirus, frente a los ministros económicos socialistas, que defendían un desarrollo más pausado de la medida, que ya estaba prevista en el programa de coalición que cerraron en diciembre. La Vicepresidencia segunda de Derechos Sociales llegó a anunciar la semana pasada que el Gobierno había logrado el apoyo de sindicatos y ONGs para poner en marcha ese Ingreso Mínimo Vital Puente ante la crisis del Covid-19, antes de implementar el definitivo. En dicho comunicado, el departamento que dirige Iglesias aseguraba que la medida definitiva podía tardar en estar lista unos tres meses y que, por ello, el Gobierno quería aprobar "de forma urgente" un Ingreso Mínimo Vital Puente que permanezca vigente hasta la aprobación del IMV definitivo.
Sin embargo, Escrivá aseguró que el Gobierno no tenía previsto aprobar esa ayuda provisional de forma inmediata, y así lo confirmó la ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, tras el Consejo de Ministros, cuando afirmó que el Ingreso Mínimo Vital tardaría "meses" en estar listo.