El magistrado de la Audiencia Nacional Eloy Velasco ha decretado el ingreso en prisión incondicional por pertenencia a organización terrorista para tres de los nueve presuntos yihadistas detenidos el pasado martes en Barcelona en el marco de una operación coordinada entre los Mossos d'Esquadra y la Policía Nacional, y que guardan relación con los responsables de los ataques en Bruselas. Corresponden a las identidades de Mohamed Lamsalak, Youssef Ben y Ahmed Aafoualah.
El titular del Juzgado Central de Instrucción número 6 imputa al segundo delito de tráfico de droga. El tercero de ellos ingresa en prisión por tenencia de armas y delito contra la salud pública. Para dos de los seis restantes se decreta cárcel igualmente porque estaban reclamados en dos causas de los juzgados de Cataluña, según fuentes jurídicas que precisan que los otros cuatro quedan en libertad con comparecencias mensuales.
En los interrogatorios, que se han prolongado durante todo el día, ha estado presente también la magistrada belga que investiga los atentados de Bruselas y ha podido trasladar sus preguntas a dos de los detenidos, que se les vincula con personas relacionadas con los atentados del aeropuerto y el metro de Bruselas en marzo del año pasado.
La investigación conjunta de ambos países ha permitido concluir que estas dos personas estaban en Bruselas en los días previos a los ataques. Concretamente llagaron el 16 de marzo y se marcharon el 23, un día después de los ataques que provocaron la muerte de 35 personas. Ambos han reconocido que se encontraban en el aeropuerto cuando estallaron las bombas pero niegan su participación en los hechos y defienden que fueron a Bruselas a comprar un vehículo.
No obstante sí reconocen que durante su estancia en Bélgica estuvieron con un primo de los autores materiales del atentado si bien han rechazado que les conocieran y han especificado que solo eran amigos del primo de los terroristas, que se inmolaron. Ahora los investigadores determinan si el dinero obtenido de la venta del vehículo era para financiar el atentado o facilitar la logística posterior.