Ley Trans

El PSOE no descarta modificar la ley del 'solo sí es sí' por las rebajas en las condenas a violadores

La polémica por la rebaja de condenas a violadores, motivada por la ley del 'Solo sí es sí', abre una nueva brecha en el Gobierno. El PSOE valora modificarla mientras Podemos habla de "justicia machista".

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Desde hace varias semanas, la oposición alertaba a PSOE y Unidas Podemos de que la ley del 'Solo sí es sí' iba a suponer un cheque en blanco para violadores y condenados por delitos sexuales. El Gobierno de coalición hizo caso omiso, hasta este martes, cuando se han empezado a aplicar las primeras rebajas de penas de prisión a personas condenadas por delitos sexuales, lo cual ha sido posible tras la aprobación de la ley del 'Solo sí es sí', que impulsó Podemos durante mucho tiempo.

La lluvia de críticas ha hecho que el PSOE se abra ahora a hacer cambios en la ley. La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha querido pronunciarse sobre ello, asegurando que "evidentemente no era el objetivo de la ley que se pudieran rebajar las penas con motivo de abuso a menores, todo lo contrario". El PSOE parece estar unido en esta cuestión, aunque no el Gobierno en su totalidad, puesto que Podemos culpa a los jueces de las rebajas y asegura que esto no tiene nada que ver con su ley.

La delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, ha asegurado en Twitter que esto es "tremendo. Un tribunal decide rebajar la pena por agresión sexual a menor, que sigue siendo de 5-10 años. (Art. 181.2 CP). Para rebajar, obvia el abuso de superioridad del padrastro (181.4). Ya lo dijo el comité CEDAW: la justicia machista crea impunidad. El problema no es la ley". Rosell insiste así en que Podemos no tiene la culpa y que son los jueces quienes, según indica ella, han malinterpretado la ley.

Las polémicas siguen creciendo

Este suceso y la polémica que gira en torno a él se ha producido tan solo unas horas después de unas declaraciones muy controvertidas de la ministra de Igualdad, Irene Montero. En su visita a Argentina, Montero acusó a los grupos antiabortistas de promover en España un "acoso diario (contra las mujeres embarazadas) metiéndolas en camiones o en furgonetas, en las que les obligan a hacerse ecografías para poder mostrarles los fetos y, por tanto, intentar convencerlas de que no interrumpan el embarazo".

Sin mostrar pruebas de sus acusaciones, Montero ha lanzado un nuevo órdago a los antiabortistas y les ha 'declarado la guerra', siendo una firme defensora del derecho al aborto. Montero estuvo en el ojo del huracán después de que aplaudiera la despenalización del aborto hasta los seis meses del embarazo en Colombia. Su apoyo a esta medida le generó muchas críticas, más aún teniendo en cuenta que ella tuvo a dos de sus hijos de forma prematura, al nacer cuando ella estaba embarazada precisamente de seis meses.

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