¿Quiénes no han secundado el aplauso de despedida a Pablo Casado en el hemiciclo por la crisis en el PP?

La crisis en el PP abierta hace hoy una semana escribe minuto a minuto nuevos capítulos difíciles de prever. Si en las últimas horas de este martes había rumores de que quizás Pablo Casado hoy no asistiese al Congreso de los diputados lo cierto es que el todavía líder de la oposición no ha dado la espantada como respuesta y ha aprovechado su intervención en el hemiciclo para despedirse.

Tras una semana en la que la guerra entre Génova y la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso ha roto al PP, Casado se ha despedido del arco parlamentarios incluso antes de anunciar su dimisión.

En el 41 aniversario del golpe de estado del 23-F, Casado ha defendido una democracia construida con "coraje" y desde la "concordia y la reconciliación" y ha pedido al Gobierno que "se ponga al servicio del interés general" porque se deben a los españoles y "a nadie más".

En su única intervención, ya que no ha aprovechado su turno de réplica, Casado ha definido la política como la "defensa de los más nobles principios y valores, el respeto a los adversarios y la entrega a los compañeros" para a continuación abandonar el hemiciclo, eso sí tras un aplauso en pie de sus parlamentarios.

Un aplauso en el que participaron casi todos ya que las cámaras han captado como dos diputadas no secundan ese homenaje, una de ellas es Marta González, persona de confianza de Alberto Núñez Feijóo y una de las promotoras de la carta en la que algunos diputados le piden su dimisión y una gestora hasta el congreso extraordinario. Ubicada en la parte del 'gallinero' Pilar Marcos, mano derecha de Cayetana Álvarez de Toledo.

Sin declaraciones oficiales todos apuntan a que será Alberto Núñez Feijóo el que tome los mandos del partido. Ana Belén Vázquez hoy en Espejo Público confesaba que "ojalá podamos tener un candidato único que consiga unirnos a todos, cerrar estas heridas porque si le va bien al PP le va a ir bien a España."

En la sesión de hoy quedó latente la soledad con la que Pablo Casado atraviesa las que parecen sus últimas horas como presidente del partido y que su dimisión podría ser inminente.

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